La mayoría cartista en Diputados aprobó la intervención al municipio de Ciudad del Este, lo que implica apartar -por ahora momentáneamente- al intendente opositor Miguel Prieto (Yo Creo) de la gestión de la segunda ciudad más importante del país, para que asuma un interventor a ser designado por el Ejecutivo.
El diputado Adrián “Billy” Vaesken (PLRA, C) solicitó primeramente tratar el pedido de intervención a la gestión del intendente cartista de Asunción, Óscar Nenecho Rodríguez, pero la aplanadora cartista en pleno lo rechazó.
El diputado Guillermo Rodríguez (Yo Creo)fue el más enfático en acusar que esto fue tiene como fin “matar políticamente” a Prieto, en una estrategia perpetrada por el cartismo.
“Señores, que ya no le engañamos a nadie. Esta no es una votación más, esto es una ejecución política llevada adelante por sicarios políticos profesionales que lo hicieron antes y lo van a volver a hacer", acusó Rodríguez.
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El mismo remarcó que “acá no molesta la falta de recibo, la falta de documentación, la falta de factura. No. Molestan las 1.300 obras, molestan las plantas asfálticas, molestan los buses eléctricos, molestan las inversiones en salud que se hicieron por millones de dólares cuando el Estado paraguayo por décadas abandonó o no a mi ciudad, a su pura suerte”.
El diputado cartista Alejandro Aguilera, presidente de la comisión especial del caso Ciudad del Este, justificó el dictamen en mayoría por la aprobación, centrándose en repetir los argumentos de la Contraloría y sin contrastar con la documentación remitida por Prieto.
Intervención en CDE: “Factura a Prieto por haberle ‘cortado el chorro’ al clan Zacarías”
Por su parte, el diputado Walter García (Yo Creo) defendió el dictamen en minoría en contra, señalando que Prieto respondió a los todos los cuestionamientos de Contraloría, y remitió documentación que no se tuvo en cuenta.
Señaló que de hecho los argumentos poco importan al cartismo, ya que la decisión estaba tomada y que el “objetivo real” es pasarle factura a Prieto por haberle “cortado el chorro” al clan Zacarías y al Partido Colorado en ciudad del Este.
“Hoy Miguel Prieto es lo que en dictadura conocíamos como perseguido político”, ya que “cuando se gestiona sin responder a la rosca, esto pasa, la mafia se enoja, esta es la respuesta”, dijo por su parte la diputada Johanna Ortega (Partido País Solidario).
La legisladora acusó que a los cartistas “les molesta que tenemos libertad de votar a conciencia, cosa que muchos no la tienen”.
Por su parte, el diputado Raúl Benítez (Independiente) dijo que el único hecho imputable a Prieto es el presunto caso de nepotismo de su exjefa de Impuestos Inmobiliarios y prima, Meribel Vallejo, pero exigió coherencia a sus colegas y que echen a sus nepobabies.
“Sean coherentes colegas, cuando hoy mencionen nepotismo, hoy mismo échenles a sus familiares de sus despachos”, retó Benítez. Acotó que “hasta el partido de Paraguay intentaron utilizar para distraer, igual no clasificamos. Todo lo que tocan rompen”.
“La decisión está desde que se sentaron con el contralor (Camilo Benítez) a tratar esta operación política”, acusó también Benítez
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Prieto quedará apartado momentáneamente por el plazo que dure la intervención (que puede ser de 60 a 90 días), recién una vez que asuma el interventor a ser designado por el Ejecutivo.
Abed defiende al clan
La líder de bancada cartista en Diputados, Rocío Abed durante la sesión de ayer habló en nombre del Clan Zacarías Irún, de nefasto antecedente en el este del país y que ahora pretende retomar el poder de la comuna.
“Todos aquellos que han tratado de montar la mentira basada en un dictamen en minoría (rechazo), lo único que han hecho es atacar al famoso clan Zacarías, al que quieren satanizar y del cual orgullosamente formo parte”, dijo.
En el clan “nunca hemos puesto obstáculos y en todas la causas ha quedado claramente demostrado a la justicia, a la ciudadanía y a Dios que no hubo tales causales”, sin embargo, justamente mediante chicanas lograron extinguir las causas del senador Javier Zacarías y Sandra McLeod y ella personalmente impidió que Contraloría audite la gestión de su esposo y actual titular de Itaipú, Justo Zacarías.
Entre los más acérrimos detractores estuvo el diputado aliado cartista Hugo Meza, que dijo que Prieto no es “una criatura de diente de leche” y que “tiene más de 40 denuncias” penales, e incluso criticó a la justicia por no actuar contra el opositor.
“No estamos ante una criatura de diente de leche, tiene más de 40 denuncias no hechas por colorados, por clanes, son hechas por sus propios amigos que le llevaron al poder y las carátulas no son precisamente juego de criaturas, lesión de confianza, asociación criminal, producción de documentos públicos de contenido falso, entre otros, esto perfectamente entrarían en un prontuario”, acusó Meza.
