Mediante un pedido aprobado ayer por el pleno de la Cámara de Diputados, el superintendente de Salud, Roberto Melgarejo fue convocado para la reunión de mesa directiva realizada en la fecha, sin embargo, según informaron, presentó justificativo médico para ausentarse, ya que, según señalan, hace días viene sufriendo un caso de presunta neumonía.
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Según señaló el vicelíder de la bancada cartista, diputado Miguel Del Puerto, se acordó reagendar la reunión para la siguiente reunión de mesa directiva, que aún no se sabe cuando se hará, puesto que el siguiente miércoles 14 es feriado por las fiestas patrias, al igual que el jueves 15.
Por su parte, la sesión ordinaria de la próxima semana se mantiene para el martes 13, por lo que la suposición lógica es que el encuentro se realice el viernes 16.
Sin embargo, de manera extraoficial, diputados miembros de la Mesa Directiva informaron que hoy prácticamente se adelantaron los temas para evitar la reunión de la próxima semana.
De confirmarse que la próxima semana no habrá reunión de líderes de bancada y autoridades de la mesa directiva, implicará que la eventual convocatoria sea recién para el miércoles 21.
Esto permitiría de paso “enfriar” el tema, que complicó seriamente a la ministra de Salud, María Teresa Barán
Santi inauguró “para la foto”
El motivo de la invitación es para tener detalles sobre el lapidario informe de auditoría realizado por la Superintendencia de Salud respecto a la inauguración -sin estar en condiciones de habilitación- de la Sala de Cuidados Intensivos Neonatales del Hospital del Villarrica.
El acto y la habilitación de la sala, con claro tinte propagandístico, encabezado por el presidente de la República, Santiago Peña, acompañado de la ministra de Salud, María Teresa Barán y el gobernador cartista de Guairá, César “Cesarito” Sosa, tuvo un derivación fatal.
Tras la inauguración, un recién nacido requirió el servicio de urgencia, y se encontraron con la lamentable realidad de que la sala no estaba operativa, y perdieron tiempo vital en buscar el traslado a otro hospital. El pequeño, penosamente terminó falleciendo.