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El pasado mes de febrero del 2023, la Comisión Nacional de Telecomunicaciones (Conatel) recibió la solicitud de adquisición de 30 computadoras y tres telecentros para instituciones educativas. El pedido fue realizado por un presidente de seccional para beneficiar a su cuñado, proveedor del Estado.
Los protagonistas
- Carlos Becker: proveedor del Estado, ex precandidato a diputado por el partido Patria Querida, beneficiado con beca de Becal, exfuncionario del Congreso Nacional, exdirector de la Unidad Operativa de Contrataciones (UOC) durante la administración de Eddie Jara en el 2017 en Petropar, durante el gobierno de Horacio Cartes. Casado con la hermana del presidente de la Seccional Nº 44.
- Alfredo Benítez: cuñado de Carlos Becker, abogado, presidente de la Seccional Colorada Nº 44, cartista. Solicitante de 30 computadoras y tres telecentros para escuelas del barrio.
- Juan Carlos Duarte Duré: presidente de Conatel, colorado, ingeniero electricista, presidente de la Seccional Nº 3.
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Modus operandi
Alfredo Benítez envió, el pasado 14 de febrero del 2023, una solicitud por escrito a Juan Carlos Duarte en su carácter de presidente de Conatel en que pide la compra de 30 computadoras y la instalación de tres telecentros para las escuelas República de Hungría, Leandro Prieto y Virgen Stella Maris. Señala que el pedido obedece a la necesidad en materia de educación.
El pedido se realizó de presidente de seccional a presidente de seccional y “coincidentemente” el proveedor de lo solicitado es Becker, cuñado de Benítez.
De esta manera se crea primeramente la necesidad y luego se conecta con el proveedor.
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Cuestionada compra de computadoras para el Congreso
El presidente del Congreso, Silvio “Beto” Ovelar, había adjudicado a la empresa Emprendimientos del Sur SA, que tiene como uno de sus representantes legales al exfuncionario del Senado Carlos Becker Pessolani, la provisión de 100 computadoras nuevas a un costo total de G. 1.677.951.026.
Posteriormente, fue suspendida, de común acuerdo con el proveedor, la provisión de 50 de las 100 computadoras nuevas que compró el Congreso, a G. 15.370.000 cada una.