Salta otra denuncia por supuesta lesión de confianza y evasión contra Hupi

La “desaparecida” Hupi Constructora SA soporta otra denuncia ante el Ministerio Público. Esta es por los supuestos hechos punibles de lesión de confianza, evasión de aportes de la seguridad social y estafa, según el escrito presentado a finales de noviembre pasado. Mediante un comunicado, viralizado anoche por redes, la firma habló de “ajustes” en su estructura empresarial.

Carlos Rebollo no atiende  nuestros insistentes llamados.
Carlos Rebollo no atiende nuestros insistentes llamados.Archivo, ABC Color

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Al menos 19 exempleados de la “desaparecida” Hupi Constructora SA, representada por Carlos Rebollo Peralta, presentaron ante la Fiscalía una denuncia por los supuestos hechos punibles de lesión de confianza, estafa, apropiación y evasión de aportes de la seguridad social. Se trata del segundo millonario reclamo que se tramita en el ámbito penal contra el principal responsable de la citada compañía.

El escrito relata que los denunciantes habían sido contratados por Hupi Constructora para ejercer diversas funciones. Señalan que en el contrato estaba incluido el monto del salario, así también la inscripción en la nómina de asegurados aportantes del Instituto de Previsión Social (IPS).

“El señor Carlos Rebollo Peralta, como CEO de la empresa, ordenaba y firmaba, mes tras mes, la planilla de pago de los salarios con EL DESCUENTO OBRERO DEL 9 %. Sin embargo, la empresa Hupi, cuya cabeza del directorio es el Sr. CARLOS REBOLLO, solamente abonó 4 cuotas del APORTE OBRERO PATRONAL, consistentes a los meses de abril, mayo, junio, julio 2022″ (sic), menciona la denuncia.

La denuncia relata que a partir del agosto 2022 se fueron realizando los descuentos a los salarios, pero estos “NO FUERON ABONADOS al IPS hasta noviembre de 2023″.

Los denunciantes señalan que es conocido que el empleador en situación de mora, que incumple la responsabilidad del seguro social, la no transferencia del aporte empleador/trabajador al IPS, está privando a sus trabajadores de sumar años de aportes para la jubilación y la pensión para los herederos, cobros de subsidios por enfermedad y maternidad.

En ese sentido, mencionan que una de las contratadas y de cuyo salario era descontado el aporte “NO PUDO ACCEDER AL SUBSIDIO DE MATERNIDAD, porque la patronal NO SE ENCONTRABA AL DÍA”.

En similar situación se encuentra otra denunciante, que se encuentra con reposo por maternidad, debiendo peregrinar por hospitales públicos para los controles y evaluaciones de su hija recién nacida, “ya que no puede usufructuar el servicio asistencial de salud del IPS porque la patronal se encuentra en mora, es más, el subsidio de maternidad del mes de octubre aún no le fue abonado” (sic), dice la denuncia.

Los denunciantes indican que la ley contra la evasión de aportes a la seguridad social fue reglamentada en el año 2019 y se encuentra en plena vigencia. “Con esta herramienta jurídica los trabajadores que sean vulnerados, en relación a los aportes al seguro Social, se encuentran facultados a realizar denuncia penal ante el Ministerio Público con la cual se inicia un proceso que puede concluir con sanciones que incluyen la pena privativa de libertad de 2 a 5 años para el empleador; esta sanción, en los casos especialmente graves, puede ser aumentada a 10 años”, fundamentan los afectados en su escrito.

Hablan de ajustes, pero no aclaran

Ya en horas de la noche, Hupi, a través de redes sociales, emitió un comunicado en el cual habla de “ajustes” en su estructura empresarial, con el fin de fortalecer su capacidad para cumplir con los compromisos asumidos. Afirma que a lo largo de este proceso estarán disponibles para responder cualquier inquietud y “proporcionar actualizaciones periódicas sobre el avance de las obras”. La empresa, sin embargo, no aclara las denuncias penales en su contra. ABC insiste desde el lunes último en contactar con el representante, Carlos Rebollo, pero no atiende nuestras llamadas ni responde mensajes.

Un dinero que nunca se entregó, afirman

El reclamo ante el Ministerio Público de los exempleados de Hupi Constructora SA se suma a la denuncia penal presentada por Cadiem Administradora de Fondos Patrimoniales SA, cuyo presidente del directorio es César Paredes. Según Cadiem, a inicios del año pasado se firmó contrato con la mencionada empresa para la construcción del proyecto residencial “Las Orquídeas”, en la ciudad de Lambaré.

La denuncia relata que en el contrato refrendado se estipuló que la constructora Hupi debía tener un poder especial para realizar ciertos trámites. Sin embargo, según Cadiem, nunca se otorgó dicha autorización.

Así quedó la construcción del residencial Las Orquídeas, según publicó una persona en redes sociales.
Así quedó la construcción del residencial Las Orquídeas, según publicó una persona en redes sociales.

Lo cierto es que, luego de que Hupi Constructora abandonara la obra y Cadiem le rescindiera el contrato, aparecieron casos de personas que supuestamente pagaron AL CONTADO Y EN EFECTIVO por unidades habitacionales en la residencial Las Orquídeas.

El escrito de Cadiem afirma que ese tipo de pagos no estaba previsto en el proyecto, atendiendo que las unidades de departamentos estaban dirigidas a beneficiados con créditos bancarios en las condiciones de la Agencia Financiera de Desarrollo (AFD).

“La información de que se realizaron pagos o anticipos a cuenta de los departamentos, de ser cierta, constituye una circunstancia sumamente grave, ya que el supuesto monto derivado de los mismos y, mucho menos, las sumas equivalentes al total de las ventas de las unidades habitacionales, JAMÁS INGRESARON AL FONDO DE INVERSIÓN” (sic), dice la denuncia contra la constructora.

Cadiem insiste en que esas sumas de dinero percibidas por Hupi por las unidades de departamentos no se encontraban previstas en el proyecto y, consecuentemente, “TAMPOCO INGRESARON AL PATRIMONIO DEL FONDO DE INVERSIÓN”.

Nuestro diario publicó dos historias sobre el proyecto residencial Las Orquídeas. Una de ellas es de una familia que pagó G. 369 millones a Hupi por un departamento. La otra es de una persona que entregó un anticipo de casi G. 60 millones por una unidad en el mismo proyecto.

En ambos casos los afectados no saben ahora a quién reclamar, porque los pagos no son reconocidos por Cadiem.

Por su parte, Cadiem dice está viendo para contratar a otra constructora para terminar la obra.

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