Lourdes Duarte, en comunicación con ABC, expresó que ni ella, ni sus dos hijas pueden creer ni logran comprender el asesinato de Guillermo Moral, ocurrido a plena luz del día frente a la Facultad de Derecho - UNA. “Hasta ahora no podemos creer. Fue una sorpresa para todos, para mis hijas y para mí. No esperábamos esto. Parece un sueño nada más”, expresó.
Lea más: Así mataron a Guillermo Moral
Contó que, pese a estar distanciados, mantenían contacto y solían verse casi todos los días en la facultad y cada fin de semana. “No estábamos separados legalmente. Él venía los sábados y domingos. Siempre nos veíamos en la facultad, porque yo también soy estudiante. Me va a costar volver, porque ahí tengo muchos recuerdos con él”, relató.
Tras 19 años de matrimonio y dos hijas de 16 y 17 años, Lourdes enfrenta ahora el duelo y el vacío, según relató. “La menor era muy apegada a su papá, quería seguir su carrera. Este diciembre será la colación de una de ellas, y vamos a estar solas”, lamentó.
Lea más: Sin resultados sobre la búsqueda de los sicarios del teniente coronel Moral
Cómo vivieron el crimen de Guillermo
El día del atentado, Lourdes no fue a clases porque debía prepararse para un examen. Se enteró del asesinato a través de un grupo de WhatsApp de sus compañeros, según detalló.
Todos los beneficios, en un solo lugar Descubrí donde te conviene comprar hoy
Lea más: Policía pide a sicarios de Guillermo Moral entregarse ante posibilidad de ser silenciados
“Enviaron un video efímero y reconocí el auto. Le dije a mi hija que era el de su papá. Les pedí a mis compañeros que manden los videos completos. Prendí la tele y ya estaban transmitiendo. No sabía qué hacer”, recordó.
Relató que al llegar al lugar del crimen ya el cuerpo había sido levantado. “Llegué tarde. Me presenté ante el fiscal, me tomó declaración, pero ya no llegué a verlo. Siempre estacionaba ahí… si me hubiera ido ese día, le iba a ver”, dijo con tristeza.
“Él recibía amenazas, pero ya no hacía caso”
La viuda confirmó que su esposo había recibido amenazas en varias ocasiones, aunque él mismo minimizaba el peligro.
“Era algo constante para él. Le escribían, lo llamaban, pero no quiso denunciar”, expresó.
Lea más: Menores son utilizados para crímenes “porque no tienen una pena elevada”, según Lizarella
Según recordó, ella en una ocasión presentó una denuncia, después de que intentaran atacarlo en Viñas Cue. “Se enojó conmigo por eso”, contó.
Aseguró que durante un tiempo contaron con patrullaje policial por la zona en donde vivía, pero con el tiempo fue retirado.
“Ni él ni nosotros teníamos custodia. Solo la Comisaría se solidarizó al comienzo. Cuando dejó de ser jefe del penal, pensamos que todo se calmaba”, agregó.
Lea más: Justifican falta de custodia para militar asesinado: “Era de bajo perfil”
Reclaman justicia
Lourdes sostiene que detrás del crimen hay un móvil más profundo que un simple ajuste de cuentas.
“No puedo acusar a nadie, pero quiero que se encuentre al autor moral y al intelectual. Los sicarios eran inexpertos. Mi esposo tuvo muchos roces cuando estaba al frente del penal. Descubría cosas, frenaba algunas cosas, y eso le generó enemigos”, afirmó.
La mujer también desmintió versiones que la vinculan con el seguimiento de los movimientos del militar. “Una vez le saqué una foto mientras dormía en el auto, solo para mostrar a mis hijas. Eso aclaré a la Fiscalía”, puntualizó.
Lea más: Asesinato de Guillermo Moral: la tardía reacción de Peña tras crimen de militar
“No quiero que su caso quede en el olvido”
Lourdes espera que la investigación no pierda impulso. “Lo que no quiero es que se quede en el oparei, como tantos casos en Paraguay. Cuando pasan los días, todo se olvida, y eso no queremos”, insistió.
Reveló además que, pese a la gravedad del hecho, no recibió ningún contacto oficial del Gobierno. “Solo algunos camaradas de las Fuerzas Militares me buscaron para acompañarme”, señaló.