Derlis Adilson Dávalos, de 31 años, buscado por el feminicidio de su pareja Antonia Salinas Espinoza, de 27 años, envió varios audios por WhatsApp a sus allegados. En ellos, aseguró estar muy afectado e incluso avisó que supuestamente no va a aguantar ni dos días sin ella.
El crimen se produjo el jueves de noche, durante el partido de Paraguay contra Ecuador, en una casa del barrio Villa del Maestro de la ciudad de Santa Rosa del Aguaray, departamento de San Pedro.
La víctima fue ultimada de varias puñaladas y su cuerpo quedó tirado el costado de la cama de su habitación.
“Sí, es muy difícil lo que pasó. Muy difícil. Ni yo creo lo que me pasó. Terrible fue lo que pasó. No voy a aguantar ni dos días así”, le dijo el prófugo a una persona que a su vez después entregó los audios a los investigadores.
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“La última vez que estuvimos juntos estábamos sentados, tomando mate y viendo el partido. Después incluso cenamos juntos. Pero después nos discutimos y ni yo creo lo que me pasó, no puedo creer lo que me pasó. Esta es la última foto que me saqué con mi Antonia. Terrible fue lo que me pasó. No voy a aguantar sin ella, nunca”, explicó el supuesto feminicida.

“Yo hasta ahora no puedo creer”, dijo el sindicado
“Yo hasta ahora no puedo creer lo que pasó. Pero nunca nadie me va a escuchar ni nadie me va a creer. Porque siempre van a decir por mí que soy un tipo violento”, contestó cuando le recomendaron que se entregue.
“Yo quisiera estar tranquilo, pero ya no voy a poder tenerla. ¿Qué voy a hacer yo sin mi Antonia? No voy a aguantar. Terrible fue lo que me pasó”, siguió justificando.
“No sé lo que va a pasar de mí. Estoy desesperado. No tengo fuerzas ni ánimo para nada. Estoy completamente desesperado”, mencionó.
Dormían juntos, pero a escondidas
El ahora buscado Derlis Adilson Dávalos fue apresado por última vez el domingo 24 de agosto pasado, luego de una supuesta brutal agresión a su pareja, Antonia Salinas Espinoza.
Sin embargo, el fiscal Juan Daniel Benítez Miranda dispuso la libertad de Derlis al día siguiente, es decir, el lunes 25 de agosto.
Según los audios de Derlis, inmediatamente después de su liberación él y ella volvieron a estar juntos, aunque a escondidas.

“Desde el martes nosotros ya dormíamos otra vez juntos, pero a escondidas. Nos íbamos a otro lugar para dormir juntos. Su familia parece que no sabía que ella declaró a mi favor en la Fiscalía”, se jactó el supuesto asesino.
En otro momento, cuando le preguntaron por qué la mato, simplemente respondió que “por una simple discusión nos peleamos”, dando a entender que el móvil del crimen fue algo insignificante.
Allanamientos infructuosos
Por otro lado, agentes de la Policía Nacional (PN) y funcionarios del Ministerio Público (MP) allanaron tres casas en busca del sospechoso, pero los procedimientos resultaron infructuosos.
Los procedimientos se cumplieron en el municipio de Lima, siempre en el Segundo Departamento, de donde son oriundos el buscado y la fallecida.
El fiscal de la causa ahora es José Alberto Godoy Blanco, aunque el que intervino en el levantamiento del cuerpo fue su colega Juan Daniel Benítez Miranda.
Este último, a su vez, es quien había ordenado la libertad de Derlis luego del último incidente con Antonia, 11 días antes de que finalmente la matara.
El fiscal Benítez, aparentemente desapareció de la zona porque ya no fue localizado en estos días.
El crimen deja en la orfandad a una hija de 9 años de la víctima.
La indignación de la comunidad ha llevado a que ciudadanos se autoconvoquen para una movilización este lunes con el objetivo de exigir justicia y la captura del presunto feminicida.
Frondosos antecedentes
El supuesto feminicida Derlis Adilson Dávalos tiene frondosos antecedentes penales, pero igual fue favorecido con la libertad pese al penúltimo ataque contra su mujer que ahora está muerta.
Por ejemplo, había sido señalado como autor de un homicidio, aunque también tiene procesos por lesión grave, privación de libertad, violación de la patria potestad y coacción, coacción sexual y violación, violencia familiar y trasgresión a la ley de armas.
Increíblemente, en todos estos casos tenía libertad por suspensión del ejercicio de la acción, extinción de la rebeldía, suspensión condicional del procedimiento y suspensión de la ejecución de la condena.
Antes de este crimen, era sujeto de varias prohibiciones, como salida del país, portar armas, consumir bebidas alcohólicas y de acercarse a su víctima.