Grupo Lince niega supuesto hecho de tortura en Ayolas

AYOLAS. El jefe del Grupo Lince Regional Misiones, subcomisario Antonio Martínez, negó que el personal del Grupo Lince haya realizado actos de tortura contra un aprehendido el viernes último en el distrito ayolense. No descarta que las lesiones sufridas por la supuesta víctima sean el resultado de una riña registrada en la vía pública poco antes de su detención.

El jefe policial Antonio Martínez negó la acusación realizada por la comunicadora social Liliana Vera, quien denunció que su hijo, Carlos Hernán González Vera (21), quien tiene problemas de adicción, habría sido torturado por personal del Grupo Lince durante un procedimiento realizado el último viernes.

En el marco de las acusaciones contra el personal a su cargo, Martínez manifestó que Carlos Hernán González había sido denunciado por perturbación a la paz pública. A raíz de ello, agentes del Grupo Lince acudieron al lugar para la aprehensión del joven y posteriormente comunicaron al Ministerio Público.

A simple vista se notaba que el mismo podría estar bajo los efectos de algún tipo de sustancia; la misma madre reconoció que su hijo es consumidor.

Al mismo tiempo, mencionó que, en el marco de algunas averiguaciones sobre el supuesto hecho, se llegó a un video en el cual se observa que antes de su detención el joven se tomaba a golpes con otra persona de sexo masculino. Con esto se estaría demostrando el origen de los golpes que presenta González. Él puso resistencia en el momento de la aprehensión, pero no fue golpeado para lograr su detención.

Denuncia de supuesto hecho de tortura

Liliana Vera había señalado que, en la noche del viernes, su hijo, quien tiene problemas de adicción, fue aprehendido por personal del Grupo Lince después de que ingresara a un local comercial. Luego fue llevado hasta la subcomisaría de la Isla Yasyretá, y ahí le empezaron a torturar con picanas eléctricas y le colocaron bolsas.

“No estoy en contra del procedimiento, pero sí de la manera de actuar. Los intervinientes lo llevaron hasta la Comisaría de la Isla Yasyretá, y ahí le empezaron a torturar con picanas eléctricas y le colocaron bolsas. Yo no digo que mi hijo sea un santo; él se fue a un negocio a crear zozobra, pero eso no justifica el actuar de los Linces”, expresó.

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