El fiscal David Cabral confirmó que el cuerpo de la niña de 12 años hallado junto al de su padre es la misma que fue denunciada como desaparecida por su madre en Central el domingo último.
“Confirmar que se trata de la niña, en este caso que desapareció el domingo en horas de la mañana y que probablemente fue llevada por su padre sin el consentimiento de la madre”, confirmó.
Agregó que cuando llegaron a la vivienda ubicada en la compañía Belén del distrito de Tacuaras, Ñeembucú, encontraron los dos cuerpos acostados en una cama.
“En principio, el médico forense en Pilar ha detectado una herida presumiblemente producida por arma de fuego en la cabeza en cuanto a la niña, orificio de entrada sin orificio de salida. En la parte de la entrada la tiene en la región parietal, tengo entendido que dijo el médico. Ahora, el recorrido del proyectil fue que llevó toda la zona hasta llegar a alojar el proyectil en la parte cervical cinco y seis. Ahí, al abrir, encontraron y pudieron llegar al proyectil y pudieron extraer”, detalló.
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Niña fue asesinada por disparo
Contó que con la autopsia ubicaron el proyectil que causó la muerte de la niña de 12 años, así como también tienen incautadas dos armas de fuego del lugar donde encontraron los cuerpos, además de un rifle de aire comprimido.
“Balística va a realizar el trabajo comparativo en este caso. Tenemos la vainilla del proyectil de la niña que se encontró en el lugar del suceso. Y en relación al hombre, también la misma cosa, tenemos disparo por arma de fuego en la altura de la cabeza, está un poquito más abajo, e indicó el médico forense que el trayecto de la bala fue de la forma horizontal, o sea, que le cruzó la bala, porque el disparo también fue de corta distancia, o sea, que apoyado prácticamente”, precisó.
Agregó que el patólogo realizará un estudio histológico para determinar si hubo o no abuso sexual, pero que no encontraron rastros de violencia o resistencia.
“Quemaduras o lo que sea, ya por el tiempo de fallecimiento también hay que tener en cuenta que ya trata de 36 a 48 horas de fallecidos, que coincide con el tiempo de la extracción de la niña del domicilio de la madre y su posterior traslado seguramente ya hasta la ciudad, en este caso era hasta el departamento de Ñeembucú, en lo que lo más probable el domingo en horas de la noche ocurrió el suceso”, indicó.
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Motivación del asesinato de niña
El fiscal contó que encontraron ambos cuerpos acostados en una cama, por lo que presumen que la niña de 12 años estaba dormida cuando fue asesinada por su padre.
“Se descarta la intoxicación. Acá lo que tenemos es que la causa de la muerte es traumatismo por disparo de arma de fuego. Esa es la causa de muerte en ambas personas, prácticamente casi en la misma región”, señaló.
Comentó que en el lugar encontraron imágenes de un santo, que sería de San La Muerte, en el piso, aunque evitó responder si sospechan que se trató de un ritual religioso.
“El motivo del porqué se llega esto, yo hablé con la madre, estuve en conversación, anoche con ella en la madrugada y ella manifiesta de que este señor no soportaba la separación que ocurrió en febrero. Que había problemas entre ellos, por lo cual ella tuvo que salir de lugar en donde vivían, donde ocurrió el suceso y que dos o tres veces vino a visitar al lugar y que en la siguiente ya se fue y le llevó sin consentimiento (el padre a la niña), o sea, el domingo pasado”, explicó.
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Desconocen antecedentes por violencia
Agregó que el lugar en donde se encontraron los cuerpos es una casa precaria, que no estaba habitada por nadie, no tenía muebles, pese a que la familia vivió ahí.
Confirmó que tanto el padre de la niña, que también fue hallado muerto, como la madre tenían problemas familiares, según confirmaron los abuelos paternos de la víctima.
Concluyó contando que no tiene conocimiento de si existe antecedente de violencia familiar, pese a la confirmación de los problemas familiares y de la ruptura de la pareja.