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La detención del suboficial Roque Atilio Romero Espínola, de 39 años, se hizo efectiva cuando el mismo se presentó en la Comisaría Segunda, donde presta servicios, y se dio por detenido. Contra el mismo pesaba una orden de captura.
Posteriormente, lo llevaron a la base del Departamento de Investigaciones de la Policía Nacional, a la espera de la oportunidad para declarar ante la Fiscalía, diligencia con la que se cumplió en el transcurso de la tarde y tras la cual el policía quedó nuevamente en libertad.
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La fiscal Rossana Coronel, titular de la Unidad de Lucha Contra el Narcotráfico de Amambay, señaló que el suboficial Romero soportaba orden de detención debido a que una motocicleta que, según los registros era propiedad del uniformado, fue incautada durante un operativo antidrogas realizado en la zona de la Colonia Estrella, al norte de Pedro Juan Caballero.
Policía comprobó venta de su moto
“El policía presentó un contrato de compra-venta de la motocicleta en el que consta que el mismo ya había vendido la moto a otra persona hace cuatro meses antes del procedimiento; lo que no hizo fue la transferencia. También presentó constancias de que estuvo de guardia en la Comisaría el día en que se hizo la operación y que al finalizar dicha guardia llevó a su hijo al hospital de Barrio Obrero”, expresó la fiscal.
“Con estos documentos y por el criterio objetivo levantamos la orden de detención”, agregó la misma.
La investigación seguirá su curso, afirma fiscal
La fiscal Coronel aseguró que la investigación por “Tenencia Sin Autorización de Drogas Peligrosas”, seguirá su curso, pero con nuevos elementos.
Dejó entrever que el suboficial Roque Romero queda prácticamente desvinculado del proceso penal e informó que emitió otras dos órdenes de detención en el marco investigativo del caso, pero no reveló la identidad de los afectados “por proteger la investigación”, según sus manifestaciones.