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La muerte de Ramón Ayala Ferreira (42), a causa de un disparo de la escopeta de un guardia de seguridad del supermercado Casa Rica de Asunción, que le dio en la pierna y le generó un shock hipovolémico, se centra en el debate sobre si sería legítima defensa o si sería homicidio doloso o culposo.
El abogado y reconocido penalista de Paraguay, José Casañas Levi, habló sobre el caso y explicó cómo se configura el hecho y los elementos que a primera vista se tienen en cuenta para calificarlo.
“Tomo notoriedad nuevamente la discusión sobre la legítima defensa y sus alcances cuando se supo que un guardia de un local comercial persiguió a alguien que había hurtado un producto de ese local y en la persecución luego de unas cuadras, el guardia dispara a la pierna con una escopeta a quien estaba corriendo. Esta primera circunstancia, ya elimina la posibilidad de la legítima defensa, por qué el que había cometido el hecho estaba de espalda, y la legítima defensa requiere que uno esté siendo atacado para poder reaccionar”, indica.
Agregó que, en segundo lugar, se discute si el hecho es un homicidio doloso o culposo, porque finalmente termina ocurriendo la muerte de quien estaba corriendo. Afirmó que es poco probable que sea doloso, porque cuando el guardia dispara hacia la persona huyendo, le dispara en la pierna, lo cual por lo general no produce la muerte.
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Por trayecto de la bala, es un homicidio culposo
El abogado dijo que lastimosamente en este caso el proyectil dio en una arteria de la pierna del que estaba huyendo, por ende, en consecuencia, eso es lo que produce el sangrado, ese shock hipovolémico, como dicen en criminalística, que es lo que produce la muerte del ladrón.
“Vale decir, no se puede decir que había voluntad de matar del guardia, pero tiene que asumir la consecuencia de la muerte, por lo tanto, estamos ante un homicidio culposo y no doloso”, concluye el penalista en un video de Radio Ñandutí.
Ramón Ayala Ferreira, quien sería la víctima de homicidio doloso por el que se investiga al guardia, contaba con varios antecedentes por hurto y era sindicado como sospechoso de 11 abusos sexuales cometidos en el 2013.