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El martes, el cardenal Adalberto Martínez se pronunció con respecto a las amenazas de muerte lanzadas contra Radio Cáritas, una histórica emisora vinculada a la Iglesia católica en Paraguay, y contra miembros del clero que residen en el Seminario Metropolitano de Asunción, donde funciona ese medio de comunicación.
“Rechazamos las amenazas al personal de Radio Cáritas así como contra el clero registradas (…) Es un hecho grave y punible que debe ser debidamente investigado por las autoridades competentes para resguardar la seguridad e integridad de las personas afectadas”, reza el mensaje del cardenal Martínez, publicado en castellano y en guaraní en redes sociales.
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Las amenazas se hicieron vía telefónica en dos ocasiones: el sábado y el domingo pasados.
“Si quieren tener qué publicar, les vamos a secuestrar a los pa’i (sacerdotes) que viven ahí y a ustedes; les vamos a cortar los dedos y les vamos a matar, así tienen noticias que publicar”, fue la amenaza emitida, según reportó la Policía Nacional.
El número desde el que fue hecha la llamada amenazante fue vinculado a Emerson Roberto Escobar (42), sobre quien pesaba una orden de captura por supuesto tráfico de drogas y lavado de activos en relación a la investigación “A Ultranza”.
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El pasado 20 de enero, Escobar se presentó en la sede de la Dirección de Delitos Económicos y Financieros de la Policía, en Asunción, para realizar una denuncia y fue detenido al saltar la alerta de orden de captura.
Sin embargo, luego de comparecer ante el Ministerio Público, Escobar fue puesto en libertad, según dijo un representante de la Policía.
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El fiscal Denis Young Park, quien emitió la orden de captura, afirmó que Escobar figuraba como comprador de una aeronave del presunto narcotraficante Miguel Insfrán, adquirida días antes del procedimiento “A Ultranza”, pero indicó que se pudo cotejar que la firma de Escobar había sido falsificada, por lo que fue liberado.