Preparación y entusiasmo, los componentes para la colación perfecta

Juntarse con los compañeros de colegio para realizar hamburgueseadas con el fin de recaudar plata para la colación es una actividad que todos los bachilleres hacen. Muchos, desde el primer curso, comienzan con la organización del UPD y del UD.

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Desde la ceremonia de graduación del noveno grado, los estudiantes planean detalladamente el último festejo que el colegio brinda: la colación. Las hamburgueseadas, las polladas y la venta de chupetines creativos forman parte de las actividades que los colegiales realizan con el objetivo de recaudar dinero que, más adelante, servirá para los gastos de los eventos.

La ropa, el lugar y la decoración son los detalles de una noche inolvidable; seguro escuchás a tus compañeras decir: “¿De qué color va a ser el vestido, qué peinado vamos a usar?”. ¡Tranquilos! Esa desesperación pasa cuando la decisión está tomada. Para algunos colegiales perfeccionistas, la indumentaria de las chicas y la de los chicos debe ir de la mano para combinar en el momento de la pasada y de la foto grupal.

El último primer día, más conocido por su abreviatura UPD, fue adoptado como una manera de despedirse del colegio y muchos institutos lo realizan cada año. Alquilar una quinta o viajar al exterior suele ser la opción elegida por los estudiantes para pasar unos días de pura diversión solamente entre los compañeros de promoción.

Así también, el UD hoy en día es una tradición cada último día de clases; el llanto, la desesperación y la tristeza se presentan, ya que nos despedimos de la casa de estudio en donde hallamos amigos que nos bancaron con las copias, las tareas, hasta con los gastos para comprar empanadas en la cantina.

“¡Epa!, qué pasa ahí”, decimos cuando existe un compañero con su parejita, la colación explota en llamas, ya que el amor entre los enamorados se llena de besos y caricias. Las peleas, las discusiones, los amores a corto plazo y las inesperadas pruebas parciales forman parte de todo curso en los centros educativos, ¿verdad?

Esos momentos son para reír con los compañeros que, gracias a la casa de estudios, resultaron buenos amigos. Si todavía no terminaste el cole, seguro se vienen momentos inolvidables que en un futuro te sacarán una sonrisa y varias carcajadas. ¿Tu curso ya se puso las pilas, qué esperan para organizar una hamburgueseada bailable y divertirse un montón? Recuerden que el tiempo pasa volando y, antes de que se den cuenta, ya pueden estar en la noche previa al UD.

Por Ezequiel Alegre (16 años)

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