Asunción sin salida

El sucesor de Nenecho Rodríguez como intendente de Asunción, sea el que sea, se va a encontrar con la misma trampa que terminó engullendo al hasta hace dos días jefe del Poder Ejecutivo capitalino: Una burocracia parasitaria y elefantiásica que se lleva más del cien por ciento de los ingresos tributarios obligando a la ciudad a endeudarse hasta para hacer veredas.

Ya están hablando, desde la Asociación Nacional Republicana, de recurrir a la ley de capitalidad para obtener lo que en términos reales es un subsidio injusto para no tener que echar a patadas al manos a un sesenta por ciento de los mencionados parásitos sinvergüenzas y para seguir obligando a los asuncenos a contribuir solamente para sostenerlos.

Lamentablemente, el Partido Liberal Radical Auténtico emula a los colorados para mantener el raquítico feudo de Augusto Wagner, sin ninguna ambición de volver alguna vez a ser lo que fue en tiempos de Rafael “Rambo” Saguier.

Y en el “tercer espacio” tienen miedo de que el aparato prebendario se encabrite y les haga la guerra, como si la eliminación del aparato prebendario es la guerra que hay que librar en Asunción, la única guerra que en realidad hay que librar para sacar a la ciudad del atolladero y la decadencia en que se encuentra.

Las grandes inversiones inmobiliarias que hoy se ven en Asunción no logran, a pesar del intenso esfuerzo propagandístico que se realiza para hacerlo, ocultar a una ciudad sumida en la suciedad, la dejadez, la falta de infraestructura, el deterioro constante de la calidad de vida; no logra ocultar la ruina de los parques, las plazas, los espacios públicos; ni la falta de iluminación, de pavimentación, de sanitación, que caracterizan a toda el área urbana excepto las dos avenidas en que construyen los inversionistas.

Todos los beneficios, en un solo lugar Descubrí donde te conviene comprar hoy

Propaganda engañabobos es esa, porque la ciudad esta hecha una mierda y los paquetísimos cafés en los que se reune la sociedad se yerguen en medio de charcos de inmundicia y lodazales pestilentes.

Mientras no se eche a patadas a los parásitos sociales que integran la hipertrofiada burocracia municipal, Asunción no tendrá remedio y los candidatos se disfrazarán seguramente de Superman o de Batman pero terminarán todos como Nenecho, teniendo que desviar los préstamos para pagar a los parásitos.

Los colorados no escarmientan en su abuso de los contratos para meter operadores políticos a las oficinas públicas y los demás creen que tienen que copiar ese modelo para competir, total, a quien joden es a la ciudadanía a la que ya empiezan a decirle que pagar impuestos para los parásitos es una suerte de mandato divino.

No tenemos salida. No hasta que algún candidato pida al pueblo confianza para destruir y aplastar a la burocracia parasitaria de sinvergüenzas, pillos y ladrones que ha destruido a la Municipalidad de Asunción.

evp@abc.com.py

Enlace copiado