Cargando...
El estacionamiento es una obra accesoria de un acceso vehicular a la nada, de apenas 300 metros de adoquinado. Es la futura entrada al futuro campus, que se pretende construir en un problemático predio de 20 hectáreas que está al lado de la sede central de la Unves, en la entrada norte a Villarrica, llamada “minicampus”.
Estudiantes cuestionan que se priorice un estacionamiento antes que aulas, pues hay facultades que no tienen sede propia y alquilan.
El rector Simón Benítez insiste en que primero se debe construir el acceso al campus. Que no se pueden construir pabellones en medio del monte si es que no hay un camino que llegue hasta el lugar. Lo cual es cierto.
Pero el acceso es de solo 300 metros lineales y se necesitan de al menos 600 metros de calle para llegar a donde se piensa construir los nuevos pabellones; lo dijo el mismo rector. Entonces, ¿por qué en vez de un estacionamiento no terminaron el acceso “al monte”?
La respuesta encierra una cuestión clasista. Las autoridades: rector, decanos, y demás, quieren un estacionamiento, quieren aparcar en un lugar bonito y caro. Dejar su auto en un estacionamiento de oro y bajarse de sus camionetas de alta gama creyendo que se merecen esa comodidad porque están abocados a la noble tarea de formar a la futura generación, generación que, si estudia, no va a gastar G. 4.000 millones en un estacionamiento cuando faltan aulas.
Y la excusa del rector y del asesor jurídico es que “dicen que”, este carísimo estacionamiento, va a solucionar el embotellamiento en la zona del minicampus. Y no es así. Si vemos los planos del estacionamiento, solo tiene lugares para 165 vehículos; la Unves tiene como 6.000 alumnos y unos 1.000 docentes y la mayoría se centra en el minicampus. No es solución. Además, en los planos, el estacionamiento es solo para vehículos de cuatro ruedas, no pensaron en espacios para motos. Eso también es clasismo. La mayoría de los alumnos que tienen movilidad propia, tienen una motocicleta.
El contrato para el estacionamiento ya se adjudicó y firmó, pero cada año hay partida presupuestaria para infraestructura. Estudiantes, exijan priorizar obras del futuro campus, más pabellones, aulas, laboratorios; es decir, infraestructura dedicada a la enseñanza, no a la comodidad de autoridades y profesores. Y cuando el estacionamiento se abra al público, no debe estar cerrado para los alumnos.