Paraguay marca un desempeño modesto en cuanto a la economía del conocimiento, ubicándose en el puesto 99 entre 141 países en el Índice Global de Conocimiento 2024 y en el puesto 33 entre los 35 países con alto desarrollo humano.
El país se encuentra en la encrucijada de la economía del conocimiento, en un mundo que cada vez más compite en la carrera de crear valor agregado como una fuente prioritaria para la generación de recursos e impulsar el desarrollo de las economías, diversificar la oferta exportable y aprovechar ventajas competitivas.
El Índice Global de Conocimiento (IGC) evalúa el desempeño de 141 países en siete áreas que promueven el desarrollo. En la última edición, realizada por el Programa de las Naciones Unidas para el Desarrollo (PNUD) y la Fundación Mohammed bin Rashid Al Maktoum Knowledge (MBRF), se analizan los avances y desafíos de Paraguay.
El estudio analizó las bases sobre las que un país construye la economía y una sociedad basada en el conocimiento, a través de siete pilares fundamentales: educación preuniversitaria, educación técnica y vocacional, educación superior, investigación, desarrollo e innovación, tecnologías de la información y la comunicación (TIC), economía y entorno general propicio.
Por otra parte, las exportaciones de América Latina y el Caribe, basadas en conocimiento, crecieron un 9% en 2023, siendo telecomunicaciones e informática los rubros de mayor repunte. En cuanto a patentes, Brasil es el país sudamericano con mayor número de solicitudes.
Paraguay en el escalón final
Los resultados para Paraguay en el IGC no son alentadores; esta vez se ubicó en el último lugar en comparación con los países de América del Sur. Los mayores desafíos y obstáculos se encuentran en la baja inversión en investigación y desarrollo, la brecha digital en el acceso y uso de las TIC, y la calidad de la educación en todos los niveles. Estos factores definitivamente impactan en la capacidad de Paraguay para generar, absorber y aplicar conocimiento de manera efectiva.
No obstante, Paraguay, tiene algunas iniciativas en marcha. Desde el 2018 ha puesto interés en la ejecución de la Agenda Digital con recursos de un préstamo del BID por más de US$ 100 millones, el desarrollo del Programa Nacional de Becas Carlos Antonio López (Becal), el anuncio de la construcción del Distrito Digital con una inversión de US$ 20 millones y el desarrollo del parque tecnológico con recursos a través de un préstamo del BID, la creación de la Universidad Taiwán Paraguay y la colaboración público-privada, para la implementación de políticas que permitan impulsar la innovación y la adopción de nuevas tecnologías.

La hoja de ruta hacia la economía del conocimiento
Para Paraguay, invertir en la construcción de una sociedad del conocimiento significa trazar un plan serio en el que el Gobierno, en colaboración con el sector privado, la academia y la sociedad civil, implementen estrategias para:
- Fortalecer la infraestructura educativa desde la base hasta la educación superior.
- Incentivar la investigación y el desarrollo, ecosistema favorable para la innovación.
- Reducir la brecha digital y alfabetización digital.
- Fomentar una cultura de aprendizaje continuo y adaptabilidad.
El camino hacia una economía y una sociedad basada en el conocimiento es un esfuerzo a mediano y largo plazo, con beneficios futuros incalculables. El IGC señala dónde estamos ahora como país y la situación crítica, y abre la puerta hacia donde debemos estar. Paraguay tiene el potencial de crecer, capitalizando sus fortalezas macroeconómicas y abordando con seriedad los desafíos, donde deben primar la voluntad política y una visión estratégica.
Oportunidades de las economías de conocimiento
Chile, Brasil, Argentina y Uruguay son países que han desarrollado con mayor éxito la economía del conocimiento, logrando exportar productos y servicios con alto valor agregado.
Chile ha impulsado sus exportaciones de servicios en conocimiento, con un enfoque en tecnología e innovación. Alcanzó exportaciones por US$ 1.180 millones, a la cabeza las tecnologías de la información y comunicación (TIC), seguido por mantenimiento y reparación, servicios profesionales, consultoría, ingeniería y arquitectura.
Las exportaciones de servicios tecnológicos crecieron en animación, editoriales, videojuegos y diseño. Los principales sectores de servicios basados en conocimiento incluyen: arquitectura e ingeniería, servicios profesionales, técnicos y empresariales, servicios financieros, tecnologías de la información y servicios de apoyo a la producción.
Por su parte, Uruguay se ha consolidado como un referente en la región en software y servicios de TI, logrando US$ 7.000 millones en 2024 en exportaciones, teniendo como principales destinos a Estados Unidos y Reino Unido, seguidos por España, Canadá, Francia, Chile, Colombia y Argentina.
Uruguay también exporta servicios profesionales, consultoría, servicios contables y servicios de centros de llamadas.
Argentina alcanzó en el 2024 exportaciones por US$ 9.000 millones, sobre todo en informática, y según un estudio del Banco Interamericano de Desarrollo (BID), los países de la región tuvieron un crecimiento del 9%. Estos países han desplegado como estrategia una importante inversión en educación, tecnología y un entorno propicio para la innovación, consolidando sus economías del conocimiento.
Economía del conocimiento de Paraguay
Las ideas son el combustible que impulsa la economía del futuro. La economía paraguaya sigue siendo fuertemente dependiente del sector primario (agricultura y ganadería), y las oportunidades que tiene el país están en la industrialización de los productos primarios y el fomento de industrias no dependientes del clima para diversificar la economía y generar un mayor valor agregado.
Paraguay tiene el potencial de crecer exponencialmente en la economía del conocimiento, dada su juventud demográfica (a la cual le quedan cinco años para llegar a su pico y posteriormente iniciar su declive, según la OIT y la Cepal) y su creciente apertura al mundo.
El régimen de maquila superó los US$ 1.000 millones en ventas anuales, lo que representa una parte importante de la industrialización; sin embargo, no todos estos ingresos representan a la economía del conocimiento.
Los servicios de BPO (Externalización de Procesos de Negocio) y el sector TIC en Paraguay muestran un crecimiento importante. Existe interés en potenciar el sector de videojuegos, animación y software, aunque aún desde una base aún pequeña. Se ha reportado que el sector TIC en Paraguay registró un incremento en los últimos cinco años, lo que indica una base de crecimiento importante.

Desafíos por resolver
Las áreas de mejora se enfocan principalmente en investigación y desarrollo, educación superior de calidad y adopción de TIC, que requieren una urgente mayor inversión y desarrollo.
Es necesario fomentar la industrialización y la creación de cadenas de valor más complejas, integrando la tecnología en sectores tradicionales y emergentes, impulsar la creación de un marco legal y de incentivos que favorezca la creación de startups tecnológicas, la atracción de IED en sectores de conocimiento y el desarrollo de nuevos servicios y productos.
Educación
Paraguay tiene una escasez de profesionales en TIC y la necesidad de generar una masa crítica de ingenieros, además de subir los niveles de inversión para potenciar investigaciones científicas.
Por ello, es prioritario trabajar en impulsar educación de calidad, fortaleciendo la formación en ciencia, tecnología, ingeniería y matemáticas, investigación y desarrollo, además de fomentar la vinculación entre la academia y el sector productivo, con el propósito de empalmar las necesidades y realidades del sector empresarial con los planes académicos de los centros de educación.
Infraestructura y conectividad
La brecha digital aún persiste en áreas rurales, lo que limita la inclusión y el desarrollo de la economía digital, por lo que es necesario desplegar inversión para conectar más territorios y personas, y a la par trabajar en proceso de inclusión, educación y cultura digital.