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Claudio Chaparro y Nicolás Aguayo planean cómo solucionar el problema de la inundación frente a su colegio mediante un plan de construcción que tienen diseñado y está en la pantalla de una computadora sobre una mesa en el Pabellón Industrial de la Expo. En otra esquina, Pablo Araújo y Mara Ramírez hablan por un grupo de al menos seis estudiantes que están muy entretenidos con un robot que montaron el año pasado y con el cuál pretenden participar en octubre próximo de una competencia nacional de robótica.
Todos ellos son estudiantes de distintas tecnicaturas del Colegio Técnico Municipal Departamental Dr. Eusebio Ayala de Villeta, que nació mediante el esfuerzo conjunto y tiene, por lo tanto, un modelo de gestión compartida entre el sector público y el privado. La institución fue construida por la Gobernación en un terreno cedido por la Municipalidad, mientras que el equipamiento estuvo a cargo de un consejo de empresarios que en el marco de sus gastos por Responsabilidad Social decidieron invertir.
Allí, los jóvenes se forman en tecnicaturas, explicó la directora de la institución, Laura Centurión. Actualmente, cuentan con cuatro tecnicaturas que son electricidad, construcciones civiles, química industrial y también desde este año con un curso de formación profesional media en mecatrónica. Los jóvenes que estudian allí, mediante el acuerdo que existe entre el Estado y las empresas, tienen la oportunidad de hacer pasantías en las distintas industrias o instituciones públicas que pueden ser de la zona o no.
La idea principal es lograr la inserción laboral y universitaria en carreras que sean verdaderamente demandadas. Según la directora, tienen un alto índice de inserción laboral, que en el caso del año pasado llegó a 80%. En cuanto a la Universidad, todavía falta impulso; actualmente, hay una inserción de poco más del 20%. Lo positivo por otro lado es que normalmente los alumnos de la institución ingresan en el primer intento a carreras muy demandantes en la Universidad Nacional de Asunción, dijo la directora.
Los alumnos estuvieron en la Expo 2016 mostrando justamente lo que hacen. Mencionaron que tienen ganas de montar otro robot, pero necesitan un kit que cuesta aproximadamente US$ 4.000. El primer kit lo obtuvieron mediante la impresa Inpaco. De todos modos, con el robot que tienen, que nació de la Academia de Robótica que ellos mismos impulsaron, seguirán compitiendo en donde puedan.