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La propuesta fue defendida por la diputada del Partido Demócrata Progresista (PDP), Desirée Masi. Dijo que se llegó a un punto, en el que cualquiera habla como asesor del Presidente, inclusive para reclamar cosas.
“Acepar denuncia que hay un asesor del Presidente que presiona para conseguir acciones”, manifestó en un momento, refiriéndose al empresario Fernando Talavera, quien se habría presentado como asesor del mandatario, reclamando una parte de las acciones para el Gobierno.
Dijo que hasta el momento no tienen idea de quiénes realmente son los “asesores ad honórem”, por lo que cualquiera puede identificarse como tal y hacer lo que quiera.
El escándalo de los “asesores” saltó luego de que el titular de la Secretaría Antidrogas, Luis Rojas, admitiese que Hugo Portillo, gerente del Banco Amambay, haya participado de operaciones contra el EPP. Este banco es una de las empresas del grupo Cartes.
Portillo no es el único empleado de las empresas del Presidente con injerencia en cuestiones de Gobierno. El propio mandatario admitió el mes pasado que tiene “dos o tres más” aparte de Portillo, y que inclusive le gustaría tener a otros más.
De hecho, parlamentarios denunciaron que José Ortíz, gerente de Tabacalera del Este (Tabesa), y Francisco Barriocanal, gerente de Gaseosas Pulp, participan de las reuniones del Consejo de Ministros.
Este último, es accionista de Acqua Group, empresa que se adjudicó un contrato directo de U$S 1 millón con la Essap, para purificar el agua que proveen en San Bernardino. Barriocanal negó que haya influido en la contratación.