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Ludovico Sarubbi, titular de la aguatera estatal, se refirió al accidente registrado la mañana de ayer, cuando un automóvil literalmente fue tragado por un descomunal bache, sobre Cacique Lambaré y Perón, en Asunción. El alto funcionario reconoció que el hundimiento en el asfaltado se produjo debido a un problema con un caño de alcantarillado sanitario. “Hay que ser honestos: nuestra infraestructura es muy antigua”, manifestó al justificar el hecho.
Al ser abordado sobre la posibilidad de que ocurran más hechos de esta naturaleza, considerando la situación reconocida, indicó que “sin que cunda el pánico, estamos en un trabajo preventivo, pero lastimosamente la vida útil de todos los caños ya venció”.
Aseguró que trabajos como los encarados sobre Artigas justamente apuntan a reducir este tipo de riesgos. “Estamos trabajando en esos puntos críticos par evitar estos hundimientos, pero faltan trabajos en otros puntos que pueden ir colapsando”, sostuvo. Al ser insistido, reconoció que, del 100% de las cañerías de alcantarillado sanitario, “el 70% tiene su vida útil cumplida”.
Explicó que la situación se torna más preocupante, considerando que estos sistemas preparados para residuos cloacales a la par actúan como desagües pluviales en días de lluvia, por lo que “se produce un desgaste más rápido”. Al ser abordado sobre otros puntos críticos, indicó que “nos preocupa sobremanera la zona del Botánico, pasando Artigas, a la mano izquierda”.
Señaló, además, que tampoco puede negarse la situación crítica en el microcentro e indicó que, para renovar los sistemas de alcantarillado en Asunción y Lambaré, se requieren de unos US$ 400 millones.