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Vicente Portillo (52), poblador del barrio San Pedro de Caaguazú, estaba cansado de que un mykurê (comadreja) se coma a sus gallinas por las noches. Tomó las riendas del caso para terminar con el animal.
Equipó su escopeta calibre 36 con una linterna en la punta del cañón, a fin de cazar a la molestosa y dañina comadreja. Cuando el sol ya se estaba poniendo, aproximadamente a las 19:00 de ayer, Portillo agarró su arma y se aprestó para tal objetivo.
Un pequeño inconveniente con la linterna hizo que Portillo se detuviera por algunos minutos. Colocó la escopeta entre sus piernas para ajustar el iluminador; entonces, en ese momento se produjo un disparo accidental que impactó cerca de su cuello y salió por el mentón, contó su hermano Miguel Portillo, reportó este lunes el periodista Víctor Ruiz.
La víctima fue atendida primero en la zona y luego trasladada la madrugada de este lunes a Emergencias Médicas, donde quedó internada. La Policía informó sobre el caso al Ministerio Público.