Fue tras la firma de los documentos por parte del presidente Horacio Cartes. El trámite de titulación fue llevado a cabo por la escribana mayor del Gobierno, Marta Narvaja, que está al frente del archivo de los títulos de bienes patrimoniales del Estado, según un comunicado de la Presidencia.
Ambos edificios quedan ahora registrados en la Dirección General de los Registros Públicos después de que fueran promulgados como bienes culturales y parte del patrimonio nacional.
La titularidad estatal del Palacio de López seguía sin oficializarse pese a que en 1871 todos los bienes de su propietario original, el presidente paraguayo Francisco Solano López (1827-1870), habían pasado a nombre del Estado mediante una ley promulgada ese año.
Sin embargo, el palacio gubernamental seguía sin titularidad estatal, entre otras razones porque se creía que gran parte de la documentación del país había desaparecido durante el saqueo que sufrió la ciudad de Asunción a manos de las fuerzas militares de Brasil. El pillaje se produjo a finales de la Guerra de la Triple Alianza (1865-1870), que causó miles de víctimas mortales paraguayas, entre ellas Solano López, asesinado por los brasileños cuando se negó a rendirse.
La construcción del Palacio de López se inició en 1857, ocho años antes del comienzo de esa guerra. En 1868 sufrió serios daños a causa del bombardeo de la escuadra brasileña anclada en la bahía de Asunción.