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El secretario general del Sindicato de Periodistas del Paraguay dijo que el periodista Dionisio Arce, quien forma parte del gremio, no puede hablar en nombre de la organización y que las gestiones que haya hecho en el caso de Carolina Ruiz fueron de forma particular.
“Él (Dionisio Arce) es parte del tribunal electoral del sindicato, no parte de la comisión directiva. La comisión directiva del sindicato ni siquiera pudo hablar todavía sobre este tema, nos enteramos anoche”, dijo el secretario general del Sindicato de Periodistas del Paraguay (SPP) con respecto a la intervención de Dionisio Arce en favor de su excolega Carolina Ruiz, quien fue desvinculada de este diario tras encontrarse pruebas de planillerismo y deshonestidad en su contra.
Ortiz señaló que todavía no tienen un pronunciamiento oficial sobre el caso porque aún no pudieron reunirse, pero afirmó que el SPP rechaza y lamenta situaciones como esta que riñen con el código de ética de la labor periodística y además involucra a otros colegas. Señaló que como organización no pueden precipitarse a comunicar algo de lo que después tengan que retractarse. “Esto riñe con la ética periodística y riñe con la ética del trabajador y la trabajadora porque nosotros como trabajadores cuidamos mucho nuestro esfuerzo, nuestro día a día y ganarnos el salario con nuestro esfuerzo, porque es nuestro principal capital la credibilidad”, dijo.
También negó la intervención del SPP en el caso del otro experiodista de ABC Color, Walberto Caballero, también desvinculado tras comprobarse públicamente que pidió dinero a la Secretaría del Ambiente, que era su área de cobertura. Arce también se había pronunciado a favor de Caballero en su momento. Ortiz dijo que la situación debe ser analizada y debatida; si bien nada justifica una acción deshonesta, es importante también hablar de las condiciones de trabajo del gremio periodístico tanto en la capital como el interior del país, saber cuáles son los factores que exponen a los trabajadores a quedar a merced de lo que ofrecen las autoridades.
También recordó que existen muchos trabajadores honestos que día a día se esmeran por ganarse el salario con su esfuerzo, que se debe tener cuidado para que este tipo de situaciones no se utilice contra la libertad de expresión, generando la idea de que todos son iguales.