Al costado del Ferrocarril, el grupo de nativos de la comunidad Yvy Morotî, compuesto por 47 personas, amaneció en el lugar bajo el intenso frío. Muchos niños acompañan a los adultos en su protesta para exigir tierras al INDI.
Las bajas temperaturas ya hacen efecto en los menores, quienes presentan cuadros gripales.
La misma situación se registra a casi 20 cuadras del lugar, frente a la sede del Indi, ubicada en Don Bosco y Haedo. Varias familias de nativos se vieron obligadas a dormir bajo carpas hechas con bolsas.
Recurrieron a fogatas para mantener el calor del cuerpo y hacer frente a las bajas temperaturas registradas entre la noche y madrugada. Muchos niños pequeños no pudieron conciliar el sueño a raíz del frío.
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