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Poco antes de la ceremonia de egreso del V curso de Operaciones Tácticas Motorizadas de la Policía Nacional, en la Academia Nacional de Policía, monseñor Adalberto Martínez, obispo de Villarrica, habló de cuestiones que atañen a la realidad nacional, como el repudio ciudadano por el “blanqueo” del diputado colorado y ladrón confeso José María Ibáñez en el Congreso.
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“Es bastante delicada la situación. Yo creo que el Congreso se merece rever la situación, sobre todo para transparentar todo lo que tiene que ver con la honorable Cámara. Para que realmente sea honorable se necesita muchísima transparencia y que nuestros políticos apunten a mejorar”, opinó.
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“Para mejorar la credibilidad de una Cámara, sobre todo para este nuevo periodo presidencial, los paraguayos nos merecemos tener legisladores que trasparenten sus acciones y que las leyes sean cumplidas, porque creo que de ahí nacen las leyes”, sentenció monseñor.
El caso de Ibáñez salió a la luz en 2013, cuando se descubrió que hizo figurar a los caseros de su quinta como funcionarios del Congreso y que no solo alteró la suma, sino que cobraba mucho más de lo que le pagaba finalmente a sus empleados.
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Por ese hecho, la Fiscalía lo acusó por cobro indebido de honorarios, estafa y producción de documentos falsos. Sin embargo, tras varias trabas, la justicia encontró el camino para no culparlo del hecho y dejar su legajo limpio a pesar de que él mismo ya confesó. Sus colegas de la Cámara de Diputados lo salvaron de la pérdida de investidura, mediante el recurso de la abstención al voto.
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