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En la capilla del Centro Educativo el padre Pedro Kühlcke, le dio el sacramento del bautismo, la primera comunión y la confirmación a unos 60 menores. El acto religioso del que participaron padres, padrinos y otros allegados de los jóvenes infractores hizo que las emociones se superpongan en todo momento.
El padre Pedro y su equipo de trabajo desde hace tiempo vienen trabajando con los internos y todos los sábados se imparte el catecismo entre los internos y ahora culminaron los cursos de primera comunión y confirmación. Con la liturgia donde se dieron los sacramentos, también hubo nuevos bautizados en la religión Católica.
Todo esto es el marco de un programa de reinserción que desde hace tiempo se viene implementando en varios penales y especialmente en el Centro Educativo, donde se trata que los menores que cayeron en el delito puedan salir en libertad y hacer uso de una segunda oportunidad y dejar el camino de la delincuencia.
La participación de los padres de los menores es fundamental ya que demuestra que el vínculo entre el interno y su familia no se cortó.