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El jugador de la Selección Nacional se presentó este jueves en el Poder Judicial para su imposición de medidas, debido al accidente que protagonizó la noche del sábado 2 de julio en el barrio Sajonia, de Asunción.
Cáceres, al ser consultado por los medios sobre el accidente, en el cual no hubo víctimas fatales, dijo que ya llegó a un acuerdo con el conductor de la camioneta Honda CVR, guiada por Dionisio Navarro, quien se encontraba con su familia, contra la cual chocó para luego terminar volcado sobre el paseo central de la avenida Carlos Antonio López.
“Ya hablé con la otra persona. Lamento lo que pasó, a cualquiera le puede pasar esto, ya arreglé todo y tengo todo solucionado”, remarcó el deportista, aguardando el momento de su imposición de medidas. Sin embargo, el “Topo” se puso notoriamente nervioso cuando le preguntaron si estaba o no bajo los efectos del alcohol, teniendo en cuenta el informe forense de la Fiscalía que indica que el jugador tenía 0,98 miligramos de alcohol por litro de sangre, según el alcotest.
“Nada de lo que se publicó es verdad. Ustedes (los periodistas) son los que dicen las cosas. Así como dije, fue un accidente y ya tengo todo arreglado”, respondió. Al ser insistido sobre si el resultado del alcotest que dio a conocer la Fiscalía es verdadero o no, contestó: “¿Vos viste que estaba alcoholizado? ¡Averiguá vos! Creé en el forense si querés”.
En otro momento, aseguró que se desplazaba a alta velocidad sobre la avenida capitalina porque supuestamente su esposa le llamó para avisarle que su hijo “estaba mal”, por lo cual se desplazaba “a 70 u 80 kilómetros por hora”. Consultado por qué huyó del lugar del accidente, respondió que “estaba un poco 'shockeado' por el accidente y solo recuerdo que me socorrieron. Tengo que agradecer a mis padres, hermanos, que me llevaron a hacer los primeros auxilios”, añadió seguidamente.
Por último, reiteró que no dio la cara días después del accidente porque estuvo “en terapia” y que ahora se puso a disposición de la justicia. “Tengo golpes, pero obviamente voy a viajar al club y vamos a ver cómo sigue todo. Tengo la conciencia tranquila”, concluyó.
Víctor “Topo” Cáceres (31) fue imputado por exposición al peligro en el tránsito terrestre y por obstrucción al resarcimiento por daños en accidente de tránsito. Entretanto, Higinio Alfredo Cáceres Agüero, y la hija de éste, Paola Cáceres Centurión, fueron imputados por frustración a la persecución y ejecución penal y resistencia, mientras que Enrique Samaniego Orihuela (cuñado del “Topo”), por el primer delito señalado.
En el caso de los oficiales 2º Leonardo Benítez y Ovidio Benítez, quienes estuvieron en el lugar del accidente, fueron imputados por frustración a la persecución y ejecución penal, por permitir que la familia del “Topo” lo lleve del lugar del percance.