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Cuatro estanques que fueron construidos bajo el episcopado de monseñor Ramón Pastor Bogarín, en el predio del Seminario San José de esta ciudad, serán recuperados, informó uno de los miembros de la Comisión Ernesto Speratti.
Añadió que la idea es abrir una escuela de piscicultura, utilizar cuatro estanques para cultivo de alevines.
Según Speratti el primer paso consiste en recuperar los estanques que fueron obras de monseñor Bogarín, primer obispo de Misiones y Ñeembucú, cuyo fallecimiento se produjo el 3 de septiembre de 1976.
Speratti dijo que los estanques son considerados patrimonios históricos, pero que una vez recuperados se pueden abrir la escuela de piscicultura y criar distintas especies de ícticas.
En primera instancia queremos desagotar las piletas y luego cuantificar el costo de la reparación, informó Speratti.
“La otra idea es darle un aspecto turístico, pero el proyecto es abrir la escuela de piscicultura y construir un estanque grande de una hectárea en el Centro Diocosano Mons. Bogarín situado en la colonia Ibañez Rojas de este distrito”, expresó.
Con la cría de pescados se podrá financiar el funcionamiento del Seminario San José, dijo Speratti.
Agregó que apoyarán el proyecto los arroceros, la Gobernación de Misiones, el Ministerio de Obras Públicas y Comunicaciones (MOPC), Facultad de Veterinaria filial (UNA) sede en San Juan Bautista y la Universidad Nacional de Pilar.
Monseñor Ramón Pastor Bogarín Argaña fue el primer obispo de esta Diócesis que abarca los departamentos de Misiones y Ñeembucú. Asumió el 19 de enero de 1957. Durante su episcopado impulsó varias obras como el Seminario San José, que cuenta con las piletas para criar peces. También construyó el monasterio de las Hermanas Clarizas; el Teatro Monseñor Rojas; la sede episcopal actual, la casa del obispo, y orientó a los agricultores a la diversificación de los rubros, entre otros.
Con las autoridades municipales trabajó coordinadamente en la tarea de hermoseamiento de la ciudad, dándole un aspecto urbano moderno a San Juan Bautista.
Monseñor Bogarín murió el 3 de septiembre de 1976, durante la cruenta persecución de la dictadura stronista. La causa de su muerte fue infarto global agudo, según el diagnostico médico de aquel entonces.