El servicio que presta la Policía Municipal de Tránsito deja mucho que desear, de acuerdo a la denuncia de los automovilistas. Tiende a ser recaudativo, sin importarles mayormente dirigir el tránsito en el centro de la ciudad, donde reina el caos a diario.
La situación empeora en las inmediaciones del colegio Sagrada Familia, en la zona de la calle España y Defensores del Chaco. En ambas calles, gran cantidad de vehículos y transportes escolares estacionan para buscar a los alumnos.
En vez de ayudar a agilizar el tránsito en esta zona, una vez más los agentes en hora pico no estuvieron. Solo ante las quejas acudieron a dirigir.
Así también, a partir de las 17:30, cuando ya terminó la salida de los escolares, “se borran” definitivamente a la hora de dirigir el tránsito, pero no así para buscar potenciales infractores.