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Mortandad de mariposas, de gallinas y otros animales de granjas, así como enfermedades respiratorias en pobladores de Nueva Colombia y alrededores causan las emisiones de gases tóxicos por parte de la empresa Archer SA, que produce carburo de silicio, denunciaron hoy los ciudadanos Max Narváez Mattos, Brigitte Fuzelier, Gustavo Taboada y Andreas Pfeifer, en una rueda de prensa, en Asunción.
Argumentaron también que desde hoy dicha fábrica ha parado la actividad de sus hornos, tras la movilización por redes sociales, y mañana, viernes, cuando lleguen los periodistas, los mismos no podrán dimensionar en su magnitud el olor tóxico al que deben acostumbrarse los lugareños, principalmente a la noche.
Anunciaron que solicitaron apoyo a la Embajada de Alemania y a organizaciones ambientalistas internacionales. Según ellos, están en riesgo los cultivos orgánicos de la zona. Entre ellos, los de caña dulce y hierbas medicinales, que pueden llegar a perder su certificación de tales.