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La chef y empresaria María Sol Fernández, esposa del empresario uruguayo Guillermo Fraga –dueños del restaurante capitalino Il Padrino– expresó a ABC Color que el exsocio de Moria Casán, el argentino Luciano Garbellano, es un delincuente conocido mundialmente y que dejó en el país una deuda de 60 mil dólares.
“No tengo ningún tipo de sociedad con este tipo (Guillermo Fraga). Este tipo se me ofreció y no le pregunté qué había hecho antes, sí sabíamos que tenían empresas fantasma, con Moria no lo contactábamos”, aseguró Garbellano al diario Crónica de Argentina.
Al respecto, Fernández aclaró que afortunadamente nunca constituyó una sociedad con el argentino; sin embargo, éste fue el intermediario para realizar negocios en nombre de la artista argentina Moria Casán.
“A Garbellano lo conocemos (con Fraga) de mucho tiempo atrás, desde que vivíamos en Miami. Nos juntamos hace 6 meses, y nos puso en la cabeza la idea de hacer una agencia de modelos y la Escuela de Arte. Ahí dijimos con mi marido ‘Vamos a hacer’, pero él nunca fue socio nuestro ni nada, íbamos a hacer esa sociedad con Moria Casán, y como él era representante de ella. Gracias a Dios nunca se hizo ninguna sociedad”, expresó.
Sobre las supuestas “empresas fantasmas” de Fraga, referidas por Garbellano a la publicación argentina, Fernández aseguró que “todo lo que dice es mentira. Nosotros vivimos 17 años en los Estados Unidos, con tres restaurantes, de los cuales dejamos solo uno abierto. Pagamos los impuestos y hacemos todo lo que tenemos que hacer”, afirmó.
Fernández señaló a ABC Color que Luciano Garbellano “no puso un peso” para el espectáculo que produjo el 27 de julio pasado, evento en el cual la artista usó las joyas reclamadas por Juan Armando Benítez.
“No puso un peso. Tuve que pagar la Conmebol y todo el show de Moria. Lamentablemente fue un fracaso, y me dejó una deuda de 60 mil dólares que yo estoy pagando. Él en ningún momento vino a poner plata ni nada, vino a chuparme la sangre”, sentenció.
La esposa de Fraga agregó que incluso alquiló la casa ubicada en Nuestra Señora del Carmen 1036 y San Rafael, frente a la mansión del expresidente de la República Andrés Rodríguez, allanada el 3 de agosto por las fiscalas Claudia Criscioni y María Stefanía González en búsqueda de Garbellano, quien estaba fugitivo de la justicia.
“Yo alquilé esa casa para la Escuela de Arte: ese clavo también tengo yo, porque puse un mes de renta. Por 2.600 dólares estoy rentando, y todavía tengo un año de renta”, afirmó.
Fernández también arremetió contra Juan Armando Benítez, propietario de “Armando Joyas”, quien declaró desde un principio que entró en contacto con Garbellano por una deuda de G. 6.000.000 de parte de Fraga.
“Es un gran mentiroso. No le debemos absolutamente nada, sino que me muestre el cheque, que me ejecute el cheque”, sentenció.
Sobre el relacionamiento entre Benítez y Garbellano, la esposa de Fraga confiesa que fue ella quien lo presentó al exmánager de la vedette. “Benítez era cliente mío del restaurante, se iba al restaurante a comer y yo le saludaba de lejos. Él vino una vez y le presenté a Garbellano, porque quería conocer a Moria”, comenta.
No es la primera vez que la vedette argentina Moria Casán intenta establecer negocios con Luciano Garbellano, quien cuenta con antecedentes por hurto, apropiación y extorsión en su país.
Operaciones con cheques sin fondo en un restaurante, una parrilla vip y una escuela de arte fueron algunos intentos que la dupla Garbellano-Casán intentó afianzar.
En Paraguay, el enlace para realizar nuevos negocios –espectáculos, una agencia de modelos y una Escuela de Arte– fue el matrimonio Guillermo Fraga-María Sol Fernández, empresarios que hoy reclaman al argentino la deuda de 60 mil dólares.
La actriz argentina Moria Casán, su asistente personal Alexis “Galo” Sotto y el productor Luciano Garbellano se encuentran imputados por la justicia paraguaya, y eximidos de la prisión por la justicia argentina, previo pago de fianza y cumplimiento de medidas, por el caso de desaparición de un colgante de brillantes con zafiros azules y un par de aros con brillantes que usó la vedette en un espectáculo y no fueron devueltos. Todos cuentan con orden de captura internacional y no pueden salir de la Argentina.
La jueza Dina Marchuk confirmó el pedido de extradición de Casán y Sotto, mientras que la extradición de Garbellano se concretará en días.