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En conversación con la 780 AM, el intendente de la ciudad brasileña de Coronel Sapucaia brindó mayores detalles sobre el ataque a su hijo, Rudi Paetzold Machado, de 19 años de edad.
El padre consideró un “milagro” que el joven haya resultado con vida, ya que -según aseguró- la camioneta en la que viajaba junto a su custodio recibió 38 balazos.
“Fue un milagro que mi hijo esté vivo”, manifestó al tiempo de señalar que no sufrió heridas graves.
La víctima recibió tres balazos: uno en una zona cercana al hombro y los otros dos a la altura del labio y la nariz, detalló.
Estimó que su hijo sería dado de alta entre hoy y mañana.
Respecto a la causa del ataque, Rudi Paetzold descartó que se trate de un ajuste de cuentas y rechazó que la familia esté involucrada con narcotraficantes.
“Mi hijo nunca tuvo problemas con nadie. Esto es 100% tentativa de secuestro. Querían llevarle. Si querían matarle, no iban a fallar”, aseveró.
Sobre la posibilidad de que se trate de un ataque del EPP, Rudi Paetzold aseguró que ni él ni su hijo recibieron amenaza alguna.
“Por primera vez sucede esto en nuestra estancia. Sí suele ocurrir robo de ganado. Siempre hay abigeato en la zona, pero esta vez vinieron por mi hijo”, aseveró.
Comentó, sin embargo, que uno de sus familiares, tío de la víctima, ya recibió amenazas aparentemente del EPP. “Mi hermano dijo que llamaron a pedirle plata”, refirió.
El joven Rudi Paetzold Machado viajaba en una Toyota Hilux junto a su custodio, Luis Alberto Esquibel Delgado, de 29 años de edad, cuando entre cinco y siete hombres encapuchados los emboscaron en una estancia de la familia, en Yaguareté Forest.
El padre descartó que se trate de policías, pese a que iban uniformados, ya que los atacantes realizaron disparos sin mediar palabras.
Aclaró igualmente que su hijo es brasileño, aunque la familia está asentada en la zona desde 1974.