El proyecto de ley, propuesta el diputado colorado Nardy Gómez, proponía que todos los trabajadores de la acería, sean obreros o funcionarios administrativos que cumplan funciones dentro de la planta, accederán a la jubilación una vez que tengan cumplidos veinte años de servicio continuado o de manera interrumpida.
Con esto se baja en diez años el tiempo de servicio. La legislación también pretendía que la jubilación ordinaria se pagará conforme al último salario que haya recibido estando en funciones.
Sin embargo, esta legislación fue vetada mediante el decreto 9.037 emitido este martes.