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El tradicional rincón capitalino muchas veces estigmatizado, dio una muestra de dignidad al rechazar los víveres que debían ser entregados por los familiares de los secuestrados Franz Hiebert y Bernhard Blatz, como una de las condiciones impuestas por el grupo criminal.
Marcelo Puentes, titular de la Comisión Vecinal, remarcó que al complejo habitacional no ingresará nada que que tenga relación con el EPP, tal y como ocurrió en 2015.
“Consideramos que Pelopincho esta haciendo un gran trabajo para cambiar su imagen, nos podrán tildar de delincuentes y drogadictos y otras cosas desagradables, pero ya no queremos ser relacionados con cosas negativas”.
Puentes refirió que mantuvo un diálogo con familiares de los secuestrados y como muestra de apoyo, organizarán una jornada de oración este miércoles a partir de las 20:00, reiterando el pedido de libertad Franz Hiebert y Bernhard Blatz.
Con esta postura, Puentes espera que el barrio deje de ser mencionado cuando existen secuestrados, en ese sentido aclaró que los menonitas pueden hacer entrega en otros sectores aledaños, como la zona del Parque Caballero.
El dirigente sostuvo además que mas allá de las necesidades que tienen al tratarse de una comunidad postergada, pero no somos una comunidad hambrienta, agregó.
Los que sí aceptaron
Un grupo de vecinos de la zona optó por recibir los víveres, alegando que si esto permite la pronta libertad de los secuestrados, “bienvenido sea”, otros manifestaron su aceptación con el popular dicho “lo de arriba no golpea”.
Durante este lunes se entregaron bolsas de alimentos por valor de 25.000 dólares, en Zanja Pytá, en el departamento de Canindeyú, como también en dos comunidades en el departamento de Concepción.