A estas horas ya se puede hablar de miles de feligreses que se encuentran agolpados en el predio de la Fuerza Aérea en Ñu Guasu, Luque, y todavía faltan varias horas para la misa que celebrará el papa Francisco en el sitio. La gente sigue llegando y el dispositivo de seguridad se va desplegando en la zona.
Dentro de la vigilia se presentaron inconvenientes que tienen que ver con la descompensación de numerosos seguidores del Santo Padre, debido a que muchos de estos se encuentran desde tempranas horas del sábado, algunos sin ingerir alimentos, o bien sin descansar, informó el periodista de ABC Color Osvaldo Cazenave.
Lo más grave que se registró es la fractura en uno de los brazos que sufrió un joven. Dentro de esto, los servidores papales también tuvieron inconvenientes para atender a los desvanecidos y heridos porque no consiguieron fácilmente camillas desde los puestos de salud instalados y la distancia también fue un elemento crucial.
El servidor Raúl Garcete, de Ciudad del Este, denunció: “No nos proporcionaron a tiempo las camillas, nos hacían firmar una planilla de mala gana”. Posteriormente, “teníamos que llevar –a los desvanecidos– hasta la parte central, es una distancia importante. Nadie previó la cuestión de camillas”, lamentó.
Luego, otra servidora denunció que no se está repartiendo agua en el lugar. Unas 20 personas aproximadamente del sector B, ubicado frente al altar, pidieron agua pero la cantidad del vital líquido no abastece. Abogan porque estos inconvenientes se puedan solucionar en las próximas horas.