“La fe, la esperanza y la caridad son los mayores talentos que Dios nos dio y debemos enriquecerlos”, dice monseñor López

SAN JUAN BAUTISTA, Misiones. De Dios recibimos tres virtudes teologales: la fe, la esperanza y la caridad, las cuales debemos enriquecer con nuestras acciones, como lo hizo María, madre de Cristo, dijo monseñor Osmar López, obispo de la Diócesis de San Juan Bautista de las Misiones, durante la celebración a Nuestra Señora de la Asunción en la capital del octavo departamento.

Conmemoran a la Virgen Nuestra Señora de la Asunción en la catedral de Misiones.
Conmemoran a la Virgen Nuestra Señora de la Asunción en la catedral de Misiones.Jesús

En la ciudad de San Juan Bautista, capital de Misiones, también se realizó la celebración a la Virgen Nuestra Señora de la Asunción en la parroquia que lleva el mismo nombre.

La celebración eucarística fue presidida por monseñor Osmar López, obispo de la Diócesis de San Juan Bautista de las Misiones (Ñeembucú y Misiones), y en su homilía destacó las tres virtudes que nos brindó nuestro Dios.

“Hemos recibido tres grandes regalos de nuestro Dios, que son las tres grandes virtudes: la fe, la esperanza y la caridad, las cuales debemos ser ricos en estos dones que nos dio nuestro creador e ir fortaleciéndolas como lo hizo María, madre de Cristo”, señaló el obispo.

“Yo suelo señalar estas tres grandes virtudes con las dos manos y el corazón. Una mano es para sostenernos, para agarrarnos de algo, y ese agarrarse de algo es lo que llamamos la fe, porque es lo que nos da firmeza y seguridad; eso es creer en Jesús, muerto y resucitado por nuestra salvación”, mencionó.

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“El corazón lo suelo comparar con la caridad, con el amor que te mueve, en el día a día, a amar, en la fraternidad, a aceptar al otro con sus defectos y virtudes, que te mueve a hacer esa obra de caridad empezando desde tu familia”, agregó López.

“Y la otra mano que utilizamos es para alcanzar algo o buscarlo, y esa es la virtud de la esperanza, que te hace extender la mano, aspirar, que tu pensamiento vaya más allá. Y por eso, entonces, estas tres virtudes uno las ve en María, madre de Cristo, y esto debemos enriquecerlo para llegar un día también donde ella está, que es al lado de Cristo Jesús”, finalizó.

Al culminar la celebración eucarística se realizó la procesión de la imagen de la Virgen Nuestra Señora de la Asunción por las principales avenidas de la ciudad de San Juan Bautista, acompañada por el obispo, sacerdotes y toda la feligresía.

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