En comunicación con ABC Cardinal este lunes, Jaime Cassola, gerente general de la aerolínea Paranair, comentó sobre un inconveniente que afectó ayer a un vuelo de esa compañía que tenía como destino Montevideo, Uruguay, y no pudo aterrizar por “problemas meteorológicos”, y respondió a quejas de los pasajeros.
Un vuelo de Paranair con 49 pasajeros, la mayoría de ellos uruguayos, despegó ayer por la tarde del Aeropuerto Internacional Silvio Pettirossi, en Luque, hacia la capital uruguaya, pero no pudo aterrizar en Montevideo debido a que una densa niebla cubría el aeropuerto de destino.
Luego de que el avión se desviara a Buenos Aires para esperar que mejoren las condiciones meteorológicas en Montevideo, algo que no ocurrió, la aerolínea resolvió que la aeronave vuelva a Paraguay.
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Los pasajeros uruguayos afirman que la empresa los abandonó a su suerte tras el regreso a Luque, sin brindarles hospedaje u asistencia alimentaria. Algunos dijeron que se vieron obligados a gestionar otros medios para regresar a su país.
“Se aplicó el protocolo”
Cassola explicó que Paranair tiene un protocolo en caso de inconvenientes como el de ayer, que incluye “dar protección a los pasajeros”, incluyendo hospedaje para quienes lo necesiten y “vouchers” de comida, y que en caso de problemas meteorológicos se los reubica en otros vuelos.
“La compañía tiene un protocolo y tiene que haberse aplicado”, dijo.
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Pasajeros afectados afirmaron ayer que la aerolínea les informó que el próximo vuelo disponible sería recién el 22 de julio.
Sin embargo, Cassola dijo hoy que los pasajeros ya han sido reubicados y “saldrán hoy a lo largo del día”.