Bernardino Caballero, aislada y olvidada: estudiantes y trabajadores caminan kilómetros para tomar un colectivo

Mientras las autoridades se jactan de obras viales y avances en infraestructura, la comunidad de Bernardino Caballero, ubicada a 15 kilómetros de Atyrá, permanece olvidada. Sin un camino en condiciones mínimas de transitabilidad, sus habitantes principalmente estudiantes y trabajadores deben caminar largas distancias cada día para llegar al centro urbano y poder tomar un colectivo.

Pobladores de Bernardino Caballero reclaman desde hace años el arreglo de camino, pero siguen sin respuestas.
Pobladores de Bernardino Caballero reclaman desde hace años el arreglo de camino, pero siguen sin respuestas.Faustina Agüero

El transporte público, no ingresa a la zona. La razón es sencilla, pero dolorosa: la vía de acceso está destrozada, intransitable en días de lluvia y apenas soportable en temporada seca. Esto obliga a los pobladores, sin recursos para contar con un vehículo propio o hacer hasta 10 kilómetros a pie para poder continuar con sus estudios o trabajos.

Antonio Ferreira, uno de los vecinos afectados, lamentó que las autoridades sigan ignorando sus reclamos. “Ya pedimos muchas veces que nos ayuden, pero no se escucha a la gente. Es como si no existiéramos para ellos”, expresó con impotencia.

El caso de Bernardino Caballero refleja la cruda realidad de muchas comunidades rurales en Paraguay, donde la falta de caminos dignos sigue limitando el acceso a derechos básicos como la educación, el trabajo y la atención médica.

En lugar de priorizar grandes anuncios, la población pide soluciones reales a problemas que se arrastran desde hace años.

La situación se agrava en los días de lluvia, cuando la vía se convierte en un lodazal, aislando completamente a la comunidad. Vecinos denuncian que han enviado notas, hecho llamados y hasta organizaron mingas para mantener en pie el único acceso, pero sin respuestas ni apoyo oficial.

Mientras tanto, los jóvenes caminan kilómetros bajo el sol o la lluvia para llegar a sus escuelas. Los enfermos deben ser cargados o trasladados en carretas, porque las ambulancias tampoco pueden ingresar. Y los trabajadores llegan tarde o agotados a sus empleos.

Bernardino Caballero espera respuestas, pero sobre todo, hechos. Porque en Paraguay, donde tanto se habla de desarrollo e inclusión, sigue habiendo varias comunidades que están condenadas al olvido.

El camino de la compañia Bernardino Caballero de Atyrá se encuentra intransitable.
El camino de la compañía Bernardino Caballero de Atyrá se encuentra intransitable.

Antecedentes de la comunidad Bernardino Caballero (Atyrá)

Hace dos meses, los pobladores de la compañía Bernardino Caballero decidieron movilizarse hasta el centro de Asunción para visibilizar el grave estado de abandono en el que se encuentra su comunidad.

Antes de esa protesta, conformaron una Comisión de Fomento y Desarrollo, con el objetivo de gestionar mejoras urgentes para su pueblo, especialmente la construcción de un camino de todo tiempo.

En aquella ocasión intentaron dialogar con la ministra de Obras Públicas, Claudia Centurión, pero les informaron que no se encontraba en su oficina. Solo fueron recibidos por el director de Caminos Vecinales del MOPC, ingeniero Guido Benítez, quien se comprometió a gestionar el presupuesto necesario para el asfaltado, aclarando que “no existen recursos por el momento”.

Los pobladores también reclamaron la ausencia total de autoridades departamentales, como el gobernador de Cordillera, Denis Lichi (ANR), y de sus representantes en el Congreso.

El pedido concreto de la comunidad es la construcción de un camino asfaltado que los conecte con las ciudades de Atyrá y Tobatí, para que de esta manera puedan trasladar sus productos agrícolas, estudiar, trabajar y mejorar su calidad de vida.

El intendente de Atyrá, Juan Ramón Martínez (ANR), manifestó que la municipalidad realiza gestiones permanentes para el mantenimiento de los caminos vecinales y la asistencia a las comunidades. Reconoció que si bien se interviene en la medida de las posibilidades, las condiciones climáticas adversas muchas veces retrasan o limitan los trabajos previstos.”

También tratamos de consultar sobre la situación al gobernador de Cordillera Denis Lichi. Lo llamamos a su teléfono celular al número con terminación 331. Pero no recibimos retorno. Estamos abiertos si desea referirse al caso.

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