Monseñor Valenzuela alerta sobre la violencia social e incremento de feminicidios

El obispo de la diócesis de Caacupé, monseñor Ricardo Valenzuela, expresó su preocupación por el aumento de los hechos de violencia social en el país y, en especial, por los casos de feminicidio que siguen enlutando a las familias paraguayas. Pidió trabajar por la unidad, la paz y el respeto a la vida en todos los espacios. Fue durante la misa central en el santuario de Nuestra Señora de los Milagros de Caacupé.

Monseñor Ricardo Valenzuela lamenta la ola de violencia y feminicidios.
Monseñor Ricardo Valenzuela lamenta la ola de violencia y feminicidios.

Valenzuela reiteró su inquietud por la creciente ola de violencia social que afecta al país y lamentó el nuevo feminicidio ocurrido este fin de semana en la zona de Naranjal, departamento de Alto Paraná.

El obispo lamentó con profunda tristeza que una vez más el país se vea sacudido por un caso así. Mencionó que no pude comprender cómo una pareja que se había conocido, que se decía amarse y que compartió años junta, terminó envuelta en un hecho de violencia fatal.

“¿Qué nos ha pasado? ¿Qué nos está pasando? Que dos personas que se dijeron amarse terminen de esta forma. Queridos hermanos, trabajemos verdaderamente por la paz, el respeto a la vida en todos los espacios, el bien común, la unidad y la concordia”, pidió.

El prelado solicitó a los presentes y a todos los paraguayos mirar su entorno y detectar las situaciones de maltrato, discriminación y violencia que se viven en los hogares, barrios, calles y lugares de trabajo.

“Cuando veas discordia, división, malos tratos y humillación, intervení, llevá un mensaje de paz, uní a la gente, reconciliá. Necesitamos empezar desde abajo, desde lo cotidiano, porque todo eso construye sociedad”, insistió.

Instó a los fieles a promover la humildad, la unidad y el amor entre los hombres como caminos imprescindibles para lograr una convivencia pacífica.

“La humildad te lleva a alturas inesperadas, mientras que la violencia no solo te echa, sino que te hunde y te deja en lo más profundo del abismo. Seamos siempre humildes, porque la humildad enseña muchas virtudes necesarias para la unidad”, expresó.

El amor como camino a Dios

A lo largo de su homilía, monseñor Valenzuela sostuvo que la mejor manera de acercarse a Dios no es únicamente a través de lecturas y libros, sino mediante las experiencias cotidianas de amor que ofrece la vida.

“Se escribe mucho sobre Dios, pero no alcanza para comprenderlo del todo. Sin embargo, en las experiencias de amor que la vida nos regala, en la entrega sincera, en los gestos de bondad, ahí está Dios”, dijo.

Reflexionó sobre los pequeños gestos que fortalecen la convivencia social y alimentan la fe: “Cuando dos niños se encuentran, no se preguntan mucho, solo juegan y comparten sin rencor. Cuando los jóvenes se dan un beso limpio, puro. Cuando dos esposos reciben la noticia de una nueva vida que viene en camino y se abrazan de alegría. Esas experiencias son las que nos acercan al Creador”, señaló.

Importante concurrencia de feligreses en el santuario de la capital espiritual.
Importante concurrencia de feligreses en el santuario de la capital espiritual.

Valenzuela afirmó que incluso en medio de nuestras torpezas e imperfecciones, las buenas experiencias humanas son valiosas y dignas de ser vividas. “Aunque las personas sean torpes o imperfectas, esos momentos buenos, esas pequeñas alegrías y gestos de amor nos acercan a Dios y nos permiten encontrar paz”, expresó.

Un llamado a la acción

Antes de culminar la celebración, monseñor Valenzuela pidió a los fieles no quedarse indiferentes ante la realidad social del país. “Mirá a tu alrededor, en tu casa, en tu barrio, en la calle, en el trabajo. Donde veas violencia, división o maltrato, intervení con palabras de unidad, de paz, de respeto. No podemos resignarnos a vivir en una sociedad violenta, tenemos que trabajar todos, desde donde estemos, por la unidad y la concordia”, exhortó.

Con un mensaje de esperanza, el obispo concluyó su homilía recordando que en la humildad, la solidaridad y la búsqueda permanente del bien común se encuentran las herramientas para transformar la sociedad y construir un país más justo y fraterno.

En la jornada dominical se pudo observar la presencia de numerosos feligreses que llegaron desde diversos lugares para participar de la misa.

Estuvieron los visitantes de la parroquia San Eugenio de Mazenod de Filadelfia, familias de Misiones, Caaguazú, Luque y Ciudad del Este.

Dónde denunciar hechos de violencia contra la mujer

Si sos víctima o tenés conocimiento de un caso de violencia contra la mujer llamá al 137 “SOS mujer”. Tiene cobertura nacional las 24 horas, todos los días, y es gratuita.

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