Por medio de su Auto Interlocutorio (AI) N° 135, la jueza penal de garantías Especializada en Crimen Organizado Lici Teresita Sánchez, decretó la prisión preventiva de tres personas detenidas el sábado último en el marco de la operación denominada Sarambí, encabezada por la fiscala antidrogas Pamela Pérez.
Se trata de Miguel Víctor Sanabria Ferreira, Francisco Mancuello Duré y Luis Fernando Nara Aguirre. Los dos primeros están imputados por los hechos de tráfico internacional de drogas (art. 26), posesión sin autorización de estupefacientes (art. 27), así como asociación criminal (art. 42) y lavado de dinero proveniente del narcotráfico (art. 44), por la Ley N° 1340/88. El tercero está imputado por los hechos tipificados en los artículos 42 y 44.
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Igualmente están investigados, los tres, por hechos punibles castigados por la Ley N° 7.411/2024 De Armas.
En todos los casos en calidad de coautores. Por esta razón los mismos deberán cumplir la medida cautelar en la Penitenciaría Nacional de Tacumbú. Esto a fin de asegurar que los mismos se sometan al proceso penal iniciado, teniendo en cuenta el peligro de obstrucción y de fuga, ante las altas penas carcelarias que tienen los hechos punibles señalados.
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Presunto líder de esquema narco está prófugo
Por otra parte, mediante el AI N° 134, la magistrada declaró en estado de rebeldía a Marciano Denis Torales (54 años), de quien se sospecha sería financista y cabecilla de una organización narcotraficante que operaba desde el departamento de Amambay.
Denis Torales fue imputado por la agente Pamela Pérez por los hechos punibles de tráfico internacional de drogas (art. 26), posesión sin autorización de estupefacientes (art. 27), así como asocición criminal (art. 42) y lavado de dinero proveniente del narcotráfico (art. 44), por la Ley N° 1340/88 y también, por la Ley N° 7.411/2024 De Armas.
En la misma situación procesal están otros sujetos, identificadas como presuntos participantes del esquema criminal. Se trata de los paraguayos Anderson Milciades Denis Colmán (26), Fernando Molina Martins (24), alias Poka, Ramón Denis Rodríguez (35), alias Ramoncito.
Igualmente, Miguel Victor Sanabria Torres (29), Mateo Gonzalez Paredes (36), Richart Saul Torres Cuellar (34), Eduardo Chamorro Romero (24), y Gabriel Antonio Benitez Aguilera (19), todos de nacionnalidad paraguaya.
Todas estas personas cuentan con orden de detención pendiente, desde el 6 de junio pasado, según el relato de las actuaciones y la imputación formulada el pasado 7 de junio.
Procesados serían del brazo logístico y lavador
En el marco del operativo Sarambí, se realizaron allanamientos en los departamentos de San Pedro, Concepción y Amambay. Así en la ciudad de San Estanislao, fue intervenida la casa de Miguel Víctor Sanabria Ferreira, quien fue identificado como suegro de Ramón Denis, que a su vez es sobrino del presunto líder del grupo, Marciano Denis Torales.
Sobre Miguel Sanabria, la Fiscalía cuenta con elementos que lo sindicarían como responsable de la logística necesaria en zonas del departamento Central para posibles envíos de sustancias al exterior, las cuales se encontrarían mimetizadas entre mercaderías declaradas lícitas.
En ese sentido, se presume que se habría encargado de buscar y alquilar depósitos en puntos estratégicos, utilizando nombres de sus respectivas empresas, tratando de evitar así, su vinculación directa con organizaciones criminales. Además, sería el encargado de buscar y pagar por la compra de camiones, con pagos en efectivo y en dólares. Este cuenta con firmas a su nombre, dedicadas al rubro del transporte de carga nacional e internacional.
En cuanto al otro procesado, Francisco Mancuello Duré, sería el capataz y custodio del arsenal vinculado a Marciano Denis. También sería el encargado de alistar la pista clandestina para el aterrizaje de las aeronaves en la estancia “Ideal” de Bella Vista Norte.
Por su parte, Luis Fernando Nara, sería el secretario ejecutor de Anderson Denis Torales, ligado a una boca de cobranza EOS, utilizada como fachada para el resguardo y protección de dinero proveniente de la actividad ilícita.
Antecedentes de la operación Sarambí
De acuerdo con datos señalados en la imputación, y que constan en las resoluciones judiciales, la investigación preliminar inició a partir de datos que daban cuenta sobre la existencia de una red criminal apostada las zonas de los departamentos de Concepción y Amambay, que se estaría dedicándose al tráfico internacional de drogas peligrosas.
La información fue compratida al Ministerio Público por la Unidad Especial de Inteligencia Sensible (SIU) Antinarcóticos de la Policía, en marzo de 2023. A partir de ahí, se inició la pesquisa bajo el nombre de “Betroka”, con la recopilación y análisis de comunicaciones, tanto llamadas telefónicas como mensajes de WhatsApp.
Los datos señalaron que este grupo estaba integrado por paraguayos, quienes se encontrarían operando dentro del territorio nacional, que se dedicaban al tráfico de drogas por vías terrestres y aéreos, utilizando como medio de transporte aeronaves provenientes de Bolivia, las cuales bajaban en esos lugares para descargar las sustancias.
Es más, esta estructura habría estado operando con la obtención de drogas dentro de territorio paraguayo, que eran movilizadas por la vía terrestre hasta depósitos en puntos específicos, donde a su vez eran procesadas y acondicionadas para ocultarlas en cargas declaradas lícitas, para ser cargadas en contenedores para su exportación a países de Europa.
Casi una tonelada de droga cayó en el Aeropuerto
La SIU de la Policía solicitó, el 3 de mayo del 2023, la intervención de los teléfonos de los investigados como supuestos miembros de la estructura narcotraficante. Coincidentemente, un año después, en el Aeropuerto Internacional Silvio Pettirossi, específicamente en la Zona Primaria del depósito de la DINAC, se detectaron 976 kilogramos de cocaína.
La sustancia estaba oculta en el interior de cajas de cartón, que a su vez contenían almidón de mandioca de la marca Selecta, los cuales estaban distribuidos en bolsas de 500 gramos paletizadas para su envío, teniendo como destino final Países Bajos.
Un año después se llevaron a cabo allanamientos en el marco de esta causa, luego de varias diligencias investigativas.