El caso más reciente de abigeato se registró en la madrugada del miércoles último en la compañía Mbaritú de este distrito, en el establecimiento denominado “Rancho Los Padrinos”. Allí, personas desconocidas, ingresaron al predio y hurtaron dos animales vacunos: un novillo de raza holando y un toro de raza jersey. Posteriormente, los animales fueron faenados en las inmediaciones del lugar.
La denuncia fue presentada por el propietario del establecimiento, Isabelino Martínez Rojas, de 55 años, quien lamentó profundamente lo ocurrido y señaló que no es la primera vez que se ve afectado por hechos de esta naturaleza. “Cada animal representa una inversión enorme y, muchas veces, el fruto de años de trabajo te hurtan en una noche”, expresó indignado el afectado.
El abigeato que agobia a los ganaderos desalienta porque en este caso la pérdida supera los G. 12 millones.
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El caso está siendo investigado por la Brigada Especializada Antiabigeato del Departamento de Paraguarí, bajo la coordinación del suboficial mayor Enrique Torres.
Durante el recorrido por la zona, los intervinientes hallaron a uno de los vacunos faenado. Los cuatreros habían dejado únicamente las vísceras en el lugar.
Hasta el momento, no se ha identificado a los autores del hecho, lo que incrementa la sensación de impunidad en la zona.
El pasado 15 de este mes, María Cristina González, del distrito de Gral. Bernardino Caballero, denunció también que desconocidos le hurtaron dos bueyes. Uno de ellos logró recuperar mediante intervención policial, pero el otro le fue robado, generándole una pérdida de G. 10 millones.
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Propuesta de lucha contra el abigeato no resulta
En febrero pasado, representantes de la Corte Suprema de Justicia, ministros, parlamentarios, autoridades departamentales y algunos intendentes del departamento de Paraguarí se habían reunido para discutir estrategias para controlar el abigeato. En dicha reunión, el ministro de la Corte Suprema, Víctor Ríos, propuso a los jueces que los abigeos no sean beneficiados más con medidas alternativas, sino que se les imponga prisión preventiva. Esto, atendiendo el contexto social de zozobra que el abigeato está generando en la región.
Sin embargo, hasta el momento no existe un seguimiento a dicha problemática, que sigue ocasionando cuantiosas pérdidas a los pequeños y grandes ganaderos.