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El mal estado de la ruta que une la compañía Panchito López de Yabebyry con el distrito de Laureles (Ñeembucú) ha llevado a un grupo de personas, cansadas de la ausencia del Gobierno Nacional y del Ministerio de Obras Públicas y Comunicaciones (MOPC), a no descartar trasladarse hasta la ciudad de San Ignacio y manifestarse cerrando la ruta PY01. A la medida se sumarían habitantes y autoridades de Laureles y Cerrito.
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Ronald López instó a los responsables del MOPC a recorrer la zona para que vean con sus propios ojos la difícil situación que viven a diario los vecinos y los transportistas que circulan por el lugar. Solo el miércoles último, seis camiones quedaron varados en el arenal; los conductores tuvieron que solicitar la ayuda de un tractorista para poder seguir trabajando.
Juan José Riveros, comerciante de San Ignacio, señaló que el camino que cruza por la comunidad de Baúles para después dirigirse hasta el distrito de Laureles está cada vez peor, por lo que ya es insostenible seguir esperando que el MOPC se decida a poner en condiciones. En el tramo, los vehículos de mediano y gran porte, quedan varados en el arenal y no pueden avanzar.
Por su parte, Emilia Céspedes, vecina del asentamiento Baúles, dijo que diariamente tienen que vivir la odisea de transitar por diferentes motivos y el camino está en muy mal estado; causan daños materiales en los vehículos particulares y de proveedores que circulan por el lugar. “Las malas condiciones de la ruta ponen en riesgo la integridad física de los estudiantes del turno noche, quienes necesariamente tienen que desplazarse por la zona”, indicó.
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