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Pobladores de Santa Librada, en Independencia, Guairá, despiden con pesar los restos de Osmar Eliel, el recién nacido que requería terapia intensiva y no pudo acceder a atención médica adecuada a tiempo.
Según Rosi Maribel Vázquez, madre del recién nacido, la falta de infraestructura hospitalaria y el mal estado de los caminos fueron determinantes en la tragedia.
La madre del pequeño, entre lágrimas, denunció que se perdió tiempo valioso para salvar la vida de su hijo debido a la negligencia de las autoridades de salud.
Señaló que al menos la tragedia de Osmar sirvió para presionar al sistema y lograr que la UTI finalmente funcione, pero lamentó que se haya requerido una pérdida humana para que las promesas se cumplan.
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Santa Librada aislada en días de lluvia
La compañía Santa Librada, ubicada a 52 kilómetros de Villarrica, enfrenta graves problemas de accesibilidad debido al deplorable estado de sus caminos.
Durante días de lluvia, la comunidad queda prácticamente aislada, lo que impide el acceso oportuno a servicios de salud.
Las Unidades de Salud Familiar (USF) en la zona brindan atención básica, pero carecen de personal y equipamiento para tratar casos graves, obligando a los pacientes a viajar con urgencia hasta el Hospital Regional de Villarrica.
La madre de Osmar reveló que esta no es la primera vez que su familia enfrenta una tragedia similar. El año pasado, perdió a otro hijo prematuro debido a la falta de cuidados intensivos.
En esta segunda ocasión, contaron con la promesa de la UTI, pero la historia se repitió con Osmar Eliel. Así también, mencionó que esta situación ya se repitió varias veces entre pobladores de la zona que no pudieron acceder a tiempo a atención médica.
La inauguración fallida de la UTI Neonatal
El 20 de febrero, el presidente de la República, Santiago Peña, encabezó la inauguración de la UTI Neonatal del Hospital Regional de Villarrica. Sin embargo, cuando Osmar Eliel necesitó atención urgente, la unidad estaba inoperativa debido a ajustes técnicos pendientes, que no fueron advertidos públicamente por las autoridades sanitarias.
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Los padres del bebé esperaron desde el mediodía hasta la noche del miércoles una respuesta de las autoridades, pero solo a las 20:30 se confirmó una cama disponible en el Hospital Materno Infantil de Trinidad, en Asunción.
La ambulancia especializada para el traslado tardó aún más en llegar, y el bebé recién fue trasladado a las 21:50. Lamentablemente, Osmar falleció a las 5:30 de hoy.
La indignación se multiplicó cuando se descubrió que no solo la UTI estaba inoperativa, sino que la ambulancia de alta complejidad donada por la Gobernación de Guairá tampoco podía ser utilizada porque le faltaba una rueda y la batería.
Repercusiones y medidas tardías
La denuncia de los padres de Osmar Eliel desató un escándalo a nivel nacional. La presión pública obligó al Ministerio de Salud a tomar medidas urgentes para habilitar la UTI y se destituyó al director del Hospital Regional de Villarrica, Dr. Cristian Matto, quien justificó la inoperatividad de la unidad con problemas menores en la infraestructura. En su reemplazo, fue nombrado el Dr. Rigoberto Alarcón.
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Sin embargo, la familia del bebé manifestó su desilusión porque ninguna autoridad de salud pública se acercó a ofrecerles condolencias ni apoyo tras la tragedia. En cambio, el gobierno utilizó sus redes sociales para anunciar con orgullo que la UTI ya estaba operativa y atendiendo a su primer paciente, omitiendo que el primer niño que la necesitó falleció por su inoperancia.
