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Vidal Cáceres explicó que de acuerdo con las informaciones periodísticas sobre el avance de las negociaciones para mejorar la situación financiera de la Entidad Binacional Yacyretá (EBY), se observa que existe predisposición de ambos gobiernos para seguir con la obra de Aña Cua. De igual manera, en la ciudad de Ayolas existe mucha preocupación por la demora en la reactivación de los trabajos y la generación de fuentes de empleo para muchas personas que, en este momento, no cuentan con ingreso económico para sostener a sus familias.
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“No existe certeza sobre la fecha de reinicio, pero se habla incluso de que se podría dar dentro del primer semestre de 2025. Verdaderamente preocupa la demora en solucionar los problemas existentes entre Yacyretá y el Consorcio Aña Cua WRT (Webuild-Rovella-Tecnodil). La expectativa por el acuerdo al que puedan llegar la EBY y la contratista se debe a la inmensa necesidad de trabajo en Ayolas”, manifestó.
El proyecto Aña Cua, financiado por Yacyretá, y que permitirá generar un 10% más de energía y un ingreso de USD 80 millones para ambas márgenes, se encuentra paralizado desde enero de 2024 por decisión unilateral del Consorcio Aña Cua WRT (actualmente representado por el ingeniero Pedro Patiño), bajo el argumento de que la crisis financiera de Argentina repercutió en el costo de la obra.
A inicios de 2024, se habló de que los trabajos iban a comenzar entre julio y octubre del año pasado. Finalmente, existían rumores de que a comienzos de 2025 se iban a reactivar las tareas.
Otros conflictos en EBY
Además, Cáceres expresó que existen otros conflictos que se generaron a raíz de la decisión de Argentina con relación a la reducción de trabajadores tercerizados que, en algunos casos, fueron despedidos después de trabajar durante 13 años y no se les pagó la indemnización. Este tipo de situaciones es responsabilidad de la Entidad Binacional Yacyretá, porque en todo este tiempo hizo contratos con empresas aparentemente de maletín, ya que ni siquiera tienían solvencia para responder al pago de las indemnizaciones, lo cual es más que preocupante.
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