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En la santa misa dominical celebrada hoy en la Catedral Metropolitana, el cardenal paraguayo, Adalberto Martínez, manifestó abatimiento por la situación del país, afirmando que estamos atravesando “noches oscuras y momentos dolorosos”.
El cardenal pidió escuchar al Señor y aceptar sus enseñanzas. Además, dijo que la Iglesia fue llamada a iluminar con el Evangelio “los tiempos difíciles que vive nuestro querido pueblo Paraguay”.
“Estamos en un sistema republicano, democrático para gobernarse, pero que sufre graves amenazas en su institucionalidad por el avance descontrolado de la corrupción, la impunidad y el crimen organizado. Expresamos nuestra preocupación y repudio ante las recientes revelaciones que evidencian un grave manejo de la justicia en el país, que causa (…) un tsunami social, cuyo epicentro del sismo es el ámbito político-judicial“, expresó Martínez apuntando hacia el Poder Judicial, Ministerio Público y al Jurado de Enjuiciamiento de Magistrados (JEM), como los entes más contaminados por la corrupción.
Chats del exdiputado Lalo Gómez, prueban corrupción en instituciones del Estado
El purpurado afirmó que las conversaciones de chat filtrados del abatido exdiputado Eulalio “Lalo” Gomes, develan la corrupción en que están involucrados miembros del Poder Judicial, Ministerio Público y el JEM “transparentando una vez más, la falta de independencia en la administración de justicia”.
“Los chats también revelan negociaciones ilegitimas que afectan la lucha contra la corrupción, el crimen organizado, el narcotráfico, tráfico de influencia y otros delitos que golpean nuestra sociedad, que entorpecen y envilecen los esfuerzos de sanear de corrupciones la administración pública por el bien del país”, expresó tajante el cardenal paraguayo.
Iglesia pidió exhaustiva investigación
Durante su homilía, Martínez afirmó que la corrupción compromete seriamente el correcto funcionamiento del Estado. Aseguró que esto influye negativamente en la relación entre gobernante y gobernados y que introduce desconfianza en las instituciones públicas causando un progresivo menosprecio de los ciudadanos por la política y sus representantes.
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“Exhortamos a una investigación severa e imparcial por parte del Ministerio Público sobre los hechos de corrupción denunciados; sancionando debidamente a los causantes o culpables”, pidió el cardenal, asegurando que solo de este modo, el pueblo podrá confiar en sus gobernantes.
Martínez pidió además “la depuración de las instituciones involucradas” y que jueces, fiscales y miembros del JEM, actúen con independencia y transparencia.
Cardenal pidió poner fin a la inferencia política
En su homilía, el purpurado también pidió poner fin a la injerencia política por el bien de las instituciones del Estado. “Necesitamos dirigentes que vivan con pasión su vocación política como servicio al pueblo, solidarios con sus sufrimientos y esperanzas, que antepongan el bien común a sus intereses privados y que no se dejen amedrentar por los poderes invisibles”, sostuvo.
Martínez finalizó la misa diciendo que: “No podemos permanecer callados e indiferentes ante el monstruo de la corrupción y de la impunidad. Es urgente pasar a la acción, trabajar juntos por el Paraguay que queremos y necesitamos”.
