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Los detenidos fueron identificados como Héctor Pereira, Corazón del Pilar Almada, José Florentín (hermano del campesino Adrián Florentín, fallecido en el enfrentamiento ocurrido el jueves) y Fermín Barúa López. Este último fue herido también durante el atropello y quedó detenido en el Hospital Distrital de Carayaó. La orden de captura contra ellos fue emitida por invasión de inmueble ajeno.
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Los custodios atacados fueron identificados como Seferiano Silvero (45), asesinado e incinerado dentro de una camioneta en el lugar, y su sobrino Júnior Cohene (23), quien fue raptado y liberado aproximadamente al mediodía del jueves 15 de agosto. También perdió la vida un supuesto invasor de nombre Adrián Florentín (30), quien recibió un balazo en el pecho, lado izquierdo.
La fiscala que lleva la causa, Lourdes Soto, manifestó que para la tarde de ayer estaba programada la realización de la prueba genética de ADN de los restos del cuerpo calcinado del guardia que fue ultimado. Señaló que los estudios forenses se harán para confirmar científicamente que es Seferiano Silvero.
El director departamental de la Policía Nacional en Caaguazú, comisario general inspector Isabelino Galeano, manifestó que la forma en que actuaron los supuestos invasores hace sospechar que tuvieron instrucciones de grupos criminales para atacar. Indicó que en el sitio encontraron explosivos de fabricación casera y que esos dispositivos no son comunes entre los campesinos.
Señaló que personal de Inteligencia se encuentra investigando ese detalle del fatal episodio.
El comisario general inspector Isabelino Galeano también dijo que unos 100 uniformados de diferentes dependencias continúan en el sitio aguardando orden para allanamientos en las propiedades de la zona.
Indicó que tienen datos de que un grupo importante de supuestos invasores se encuentra oculto en una propiedad privada cercana al establecimiento atropellado el jueves.
Hecho similar
Otro ataque similar al citado precedentemente ocurrió el mismo día y hora en la estancia La Reina del distrito de Capiibary, departamento de San Pedro. Allí fue herido con arma de fuego Gil Silvero (71), padre del asesinado e incinerado en Simón Bolívar, Seferiano Silvero.
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ARP exige poner fin a la violencia
La Asociación Rural del Paraguay exige que las autoridades den respuestas y que termine la violencia en el campo como los hechos sucedidos en establecimientos de Simón Bolívar y Capiibary. Daniel Prieto, de la Asociación Rural del Paraguay (ARP), resaltó lo llamativo de la simultaneidad de los ataques a las propiedades ocurridos el jueves, además del parentesco entre los trabajadores de los dos lugares a pesar de la distancia.
“No hay que dejar pasar como un hecho aislado, por el grado de violencia, simultaneidad y agresividad con las que actuaron los invasores”, expresó.