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El concejal Juan José Arnold presentó una propuesta que apunta a hacer modificaciones a la ordenanza N° 183/04 04 “Que regula los ruidos molestos”. El edil considera que es necesario actualizar el ordenamiento legal administrativo que regule el problema de la polución sonora, ya que actualmente no hay sanciones reales y la ciudadanía tampoco tiene bien establecidos mecanismos de denuncia.
Si bien el edil plantea numerosos cambios, se centra principalmente en adecuaciones normativas para el funcionamiento de las famosas “terrazas o rooftops”, donde son frecuentes fiestas de distintos tipos de bares sin respetar los límites de sonido regulados por ley.
El proyecto insta a estos locales a fortalecer el aislamiento acústico, ya que ha habido muchas quejas de la ciudadanía.
En este sentido, el concejal considera fundamental tener mecanismos actualizados para que la ciudadanía denuncie cuando se vea afectada por este tipo de sonidos molestos.
Locales deberán dar más explicaciones
De aprobarse la propuesta del concejal, los locales deberán dar muchas más explicaciones a la Municipalidad como, por ejemplo, el horario de inicio y cierre de las actividades, el motivo del evento, etcétera.
Además, deberán cumplir con los niveles máximos establecidos para el sonido, describir técnicamente sus equipos musicales, la potencia acústica que utilizan, la potencia de altavoces, etcétera.
Así, se pretende garantizar una ubicación armónica de los parlantes para la uniformidad del sonido. La normativa de Asunción establece un rango de 60 a 75 decibeles como máximo durante el día, con picos de 80 a 90 decibeles, y 45 a 60 decibeles durante la noche.
Límites establecidos en decibeles
Como referencia, la Organización Mundial de la Salud (OMS) considera que a partir de los 70 decibeles durante el día y de 45 decibeles durante la noche ya se habla de una mala calidad acústica.
Además, los locales deberán presentar una declaración jurada de comunicación sobre su evento -escrita con 24 horas de antelación- a la comisaría jurisdiccional.
Con esta comunicación a la comisaría local se pretende que, en caso de denuncias, los efectivos policiales puedan corroborar cualquier tipo de incumplimiento.
Se debe también presentar el comprobante del pago de impuestos, tasas o contribuciones para la realización de este tipo de eventos. Este cambio es sugerido por el concejal con el objetivo de tener trazabilidad de las autorizaciones.
Difusión de publicidad con altavoces
Solo se podrá hacer difusión de publicidad con amplificadores si se tiene autorización municipal. Están incluidas dentro de esta restricción las campañas de concientización cívica, electoral o de educación comunitaria.
Para conseguir la autorización, los interesados deberán firmar un compromiso de cumplir con los niveles máximos de sonido establecidos en la ordenanza, detallar horarios de inicio y cierre y pagar los tributos fijados.
Los horarios permitidos son de 8:00 a 12:00 y de 15:00 a 20:00, mientras que los feriados se permitirá la publicidad sonora de 9:30 a 12:00 y de 16:00 a 20:00.
Estos cambios se sugieren para que la Municipalidad tenga mayor información y así facilitar las intervenciones en caso de incumplimiento de las normativas.
¿Dónde podrá denunciar el ciudadano?
De acuerdo a la propuesta, cualquier persona podrá denunciar ante cualquier autoridad municipal, policial o fiscalía penal ambiental los ruidos molestos y estas entidades estarán obligadas a intervenir y disponer la reducción o prohibición de estos sonidos.
Los vecinos afectados por sonidos molestos pueden además recurrir a mediciones realizadas por profesionales técnicos habilitados o personal policial interviniente, con equipos adecuados debidamente certificados por el Instituto Nacional de Tecnología y Normalización (INTN).
Entre varias de sus propuestas puntuales, el concejal manifestó que su intención es que se formalicen los mecanismos de denuncia para que se den las sanciones y no queden impunes los delitos.
Propone que multas se usen para adquirir sonómetros
El edil insistió en que esta actualización es necesaria para estar en concordancia con las leyes vigentes y también con lo que establecen los países de la región.
Continuando con sus planes de acción, el concejal planteó que el destino de las multas que se establecen en la Ley 6.390 ‘Que regula la emisión de ruidos’, vaya a la adquisición de sonómetros.
Propone que se establezca una cooperación con la Policía Nacional y que la Comuna les done sonómetros y recursos logísticos para las intervenciones, siempre de acuerdo a la disponibilidad presupuestaria.
Plantea además que quienes transgredan las normas y lleguen a instancia judicial sean obligados por la Fiscalía a donar sonómetros a la Municipalidad o a la Policía.