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La vocación docente de Alba Mosqueira tiene sus raíces en la inspiración que le brindó su propia madre, quien también fue maestra. Desde pequeña, observó la dedicación de su madre y la ayudaba con la planificación y corrección de tareas, sembrando en ella el deseo de seguir sus pasos. Toda su familia, incluidas sus hermanas, abrazaron la carrera docente.
La profesora Alba se formó en el Instituto Nuestra Señora de la Asunción y ha enseñado todos los grados de la educación básica, principalmente en la escuela básica Nº 26 Gral. “José Elizardo Aquino”. Cada año, cada grupo de estudiantes representa un desafío único y especial para ella. “Me tomó tanto cariño con los niños como si fueran mis propios hijos, que es muy difícil despedirme de ellos al finalizar el año lectivo”, expresa.
A lo largo de su trayectoria, la profe Alba ha comprendido la importancia del acompañamiento parental en la educación de los niños. Lamenta que, debido a las condiciones económicas, muchos padres deben trabajar y dejan la formación de sus hijos enteramente en manos de los docentes.
“Aconsejo a los padres regalar tiempo en calidad, porque lastimosamente en cantidad no se puede, pero hacer del poco tiempo que se tiene con los hijos un momento constructivo y enriquecedor. Brindarles cariño, afecto y amor por sobre todo, que ellos lo necesitan”, subrayó.
La docente destaca el vínculo especial que se forma con los estudiantes, quienes muchas veces comparten sus vivencias diarias con ella. “Los niños me transmiten mucho amor, un amor sincero”, afirma con ternura.
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El amor de la profe Mosqueira por los animales
La profesora Alba Mosqueira es una gran amante de los animales. Le encantan todas las criaturas y disfruta mucho de su compañía. Cuida y respeta a los animales que encuentra. En sus clases siempre habla con cariño sobre la importancia de proteger a los animales y sus hábitats naturales.
Finalmente, la profesora Mosqueira lamenta la falta de oportunidades que enfrentan los jóvenes egresados del sistema educativo en el país.
“Es una pena que a los jóvenes que salen de las escuelas y quieren estudiar no se les dé la oportunidad a ese derecho universal. Es muy triste ver cómo nuestros alumnos crecen y no tienen oportunidades en este país. El gobierno debería apostar por estos jóvenes, que son el futuro y actual presente de nuestro sociedad”.
Su mensaje final es un llamado a los padres: “Acompañen a sus hijos, hablen con ellos, porque tristemente vemos hoy en día que los chicos están creciendo solos”.