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Un conflicto laboral de importancia se generó en el Instituto de Desarrollo Rural y de la Tierra (Indert), a raíz de que la institución inició las gestiones legales para intentar jubilar en forma obligatoria a cerca de 57 funcionarios, que ya son mayores de 65 años, pero existe rechazo, sobre todo desde el sector sindical.
El responsable de Recursos Humanos del Indert, Abog. Angelo Gill, confirmó que se está procediendo a notificar a los funcionarios que ya cumplen las condiciones para la jubilación, que es tener más de 65 años, pero que para realizarlo en forma ordinaria se requieren 20 años de servicio.
Explicó que el procedimiento que están realizando en base a la Ley N° 4252/2010, que establece la jubilación obligatoria al cumplir los 62 años, pero que tropiezan con el rechazo de varios de los afectados.
Indicó que, por un lado, la oposición a la jubilación obligatoria de funcionarios mayores de 65 años es mayormente porque no quieren perder el seguro médico privado que tienen los empleados del Indert.
Otra dificultad que se plantea con la jubilación de los empleados es la exigencia por parte de los gremios sindicales del ente, del pago de una gratificación por jubilación.
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También informó que varios de los funcionarios que ya pasaron la edad y no se quieren jubilar, interpusieron amparos constitucionales, alegando que el derecho al trabajo está garantizado en la Constitución Nacional.
Una de las opciones que está manejando el Indert para los funcionarios que tienen la edad y que no se quieren jubilar para no perder el seguro médico es que se está analizando uno extraordinario para exfuncionarios, pero eso es solo una idea, aclaró.
También refirió que otro aspecto que frena a muchos funcionarios a aceptar la jubilación son los sobresueldos, ya sean por cargos de responsabilidad, bonificaciones extraordinarias. Detalló que de los 57 funcionarios, 9 ocupan cargos de responsabilidad.
“Realmente no hay una intención de despido masivo, solo se está procediendo a hacer cumplir la ley; además, los casos serán remitidos a la Dirección de Jubilaciones y Pensiones para que analicen caso por caso”, acotó.
Por su parte, el secretario general del Sindicato de Trabajadores de la Reforma Agraria (Sintra), Lino Avila, con 32 años de antigüedad, denunció que el objetivo del Indert es un despido masivo de funcionarios, con la excusa de la jubilación y que no se quiere pagar la gratificación establecida en el Contrato Colectivo, en el artículo 60, monto que se debe estimar en cinco veces el salario mensual, por única vez. Agregó que exigiendo dicho aspecto entregó una nota al presidente del Indert, como titular de Sintra.
Avila también denunció el trato presuntamente inhumano de la institución para con una funcionaria, quien tuvo que traer a su hijo enfermo para que las autoridades del ente pudieran dar solución a un problema que tiene con el seguro médico, en relación a una muy larga internación.
Prometen 32.403 títulos de finca
El presidente del Indert, Francisco Ruíz Díaz, informó que durante el 2023 se entregaron 2.854 títulos, que según varias fuentes internas de la institución, en su mayor parte, fueron mérito y gestión del gobierno anterior; sin embargo, su titular se ufana de que los títulos de la administración anterior solo fueron 566 del monto señalado.
Según Ruíz Díaz, al ritmo actual, con 22,1 títulos por día, la entrega de títulos para el fin del periodo de Gobierno, 2028, se entregarían en total 32.403. “La titulación masiva es uno de los primeros grandes logros de la administración actual”, destacó.