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El exclusivo auto Lamborghini Gallardo 2008 del exsenador liberal Alfredo Jaeggli sigue en la Argentina desde que el pasado miércoles fuera retenido por oficiales de la Gendarmería de ese país, con el argumento de que carecía, supuestamente, de documentos.
El exsenador había acusado a los gendarmes argentinos de ser una gavilla de ladrones y coimeros, y ha asegurado que todo estaba en regla. Consultado hoy por la situación de su vehículo contestó que “la gavilla sigue”, y que están “haciendo tratativas para que lo devuelvan al sitio donde se incautó en el territorio argentino”.
“Los de Resistencia se declaran incompetentes, pero para atajar al coche sí se declararon competentes. Estamos ante una gavilla absolutamente internacional. Entiendan bien eso. Una gavilla internacional contra los autos de alta gama. Pasan los autos de alta gama y ya se llaman por teléfono. Se entienden todos. Son una porquería”, señaló.
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Recurrirá al canciller argentino
Consultado sobre alguna medida que vaya a tomar para la recuperación del vehículo, dijo que ya está hablando con el embajador paraguayo para facilitar los trámites. “Voy a llegar incluso hasta al ministro de Relaciones Exteriores de Argentina. Voy a destruir a esta gavilla”, aseveró.
Con respecto a las circunstancias de la detención, reiteró que el auto no andaba. “Entonces subimos al Automóvil Club, a una grúa. Y le dijeron a mi hijo que no hacía falta el acompañamiento y nada por el estilo. Y lo mandaron otra vez. Vino conmigo en el avión. Y el coche lo retuvieron en Resistencia”, dijo.
“Todos los papeles en orden, con seguro, cédula verde, todo. Mucha gente fue damnificada ya allá, mucha gente”, dijo en referencia a denuncias que ya recibió de que este sería el modus operandi de recaudación de algunos grupos en la Gendarmería argentina.