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Muchos deportistas de diversas disciplinas ya fueron afectados por la chikunguña y, si bien se supone que son personas con mucha más resistencia física que otras de vida sedentaria, la enfermedad ataca de la misma manera; sin embargo, existen algunas diferencias a la hora del tratamiento.
El cirujano ortopédico Rodrigo Casaccia, especialista en traumatología deportiva, explicó que el manejo del tratamiento de la enfermedad en sí no varía mucho entre una persona que hace deportes y otra que lleva una vida sedentaria; sin embargo, resaltó que el deportista tiene la ventaja de contar con una mayor capacidad de reacción ante el tratamiento.
Otra de las ventajas es también el acceso inmediato a un plantel médico que ataca la enfermedad de manera rápida, mientras que una persona no deportista debe esperar muchas veces un turno que, en ocasiones, significa días de espera.
“Los profesionales del deporte tienen más medios para el control de la inflamación local con fisioterapias antiinflamatorias, seguimiento cercano para que vuelva al entrenamiento y regrese a la práctica deportiva, además de los controles diarios para no prolongar el tiempo de reposo”, especifica el profesional de la salud.
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La persona no deportista, por lo general, tarda más en llegar a la consulta, mientras que el deportista consulta ante el primer síntoma, por el acceso al equipo médico que tiene durante prácticamente las 24 horas.
Esto hace que lleve mucho más tiempo desinflamar las zonas afectadas cuando no se acude de inmediato al médico, manifiesta Casaccia.
Medicamentos y reposo
En cuanto a los medicamentos no hay mucha variación: se receta analgésicos o no se receta anti inflamatorios en la etapa aguda. Analgésicos como el paracetamol, dipirona y tramadol se utilizan en esta etapa, comenta el doctor Rodrigo Casaccia.
Agrega que, una vez pasada la etapa aguda, en ambos casos, si no hay problemas hepáticos o renales se utilizan antiinflamatorios clásicos como ibuprofeno o diclofenac.
En casos particulares sí se utilizan medicamentos más específicos para las articulaciones, como celecoxib y etoricoxib, menciona.
Un punto muy importante a tener en cuenta es que, en la etapa aguda, tanto deportistas como no deportistas “deben hacer reposo o, de lo contrario, es más difícil el control de la inflamación”, indica el médico especialista.
Las secuelas de la chikunguña
“Puede dejar ciertas secuelas en las articulaciones. En el caso del deportista, cuando vuelva a la práctica o vuelva a exigirle mucho a su cuerpo, puede ser que le genere ciertas inflamaciones, es una posibilidad”, manifiesta Rodrigo Casaccia, resaltando que aún no se dieron casos específicos.
Sin embargo, aclara que los picos de chikunguña fueron entre diciembre y febrero, por lo que las consecuencias, si las hay, se irán presentando en los próximos meses, ya que la población afectada aún está en proceso de recuperación.
No minimizar los síntomas de la chikunguña
El profesional, especializado en traumatología deportiva, instó a no minimizar los síntomas de la chikunguña.
Tanto deportistas como no deportistas deben acudir a un centro asistencial ante la sospecha de la enfermedad.
“Ante dolores articulares, fiebre, cansancio importante u otros síntomas se debe acudir a un centro asistencial y hacerse el chequeo. A veces uno quiere minimizar el hecho, eso baja las defensas y hace que el virus se reproduzca con mayor facilidad en el cuerpo”, enfatizó.