La circunvalación de las obras de ampliación de la Ruta PY02 sigue generando todo tipo de inconvenientes desde el inicio del trazado vial. Las obras de ampliación están a cargo del Consorcio Rutas del Este y el Ministerio de Obras Públicas y Comunicaciones (MOPC).

Los trabajos desde Ypacaraí hasta Caaguazú están presupuestados en 500 millones de dólares y el Gobierno nacional debe cubrir 1.700 millones de dólares a las firmas del consorcio en un plazo de 30 años, mediante la explotación del cobro de peajes, que entró en vigencia en el año 2018.

Entre los múltiples problemas, los barrios “las Colinas 1 y las Colinas 2″ de la ciudad de Caacupé se ven constantemente afectados. Angélica Rodríguez, pobladora de las Colinas 2, manifestó que los trabajadores están infringiendo las leyes de cuidados ambientales en la zona de obras.

La vecina relató que ayer a partir de las 16:00 empezaron a realizar las explosiones con dinamita y solo a unos metros se encuentran ubicadas varias casas que son afectadas por estos trabajos. Según relata la mujer, esta situación ocurre varias veces y por eso se genera una considerable preocupación entre los residentes.

“Yo vivo un poco más lejos de la zona de obras y el impacto de la explosión que sentí ayer fue tan fuerte, que movió mi mesa de cemento. Los que estaban cerca se asustaron mucho más”, expresó con preocupación la denunciante.

Indicó además que están haciendo esas explosiones sin permiso de la “SEAM” -actualmente Ministerio del Ambiente y Desarrollo Sostenible-, e incluso aseguró que ya les consultaron a los trabajadores si tienen el permiso para realizar ese tipo de procedimientos en un lugar donde hay mucha gente y los obreros “no supieron qué responder”.

Lea más: Siguen las quejas por la ampliación de la ruta PY02

200 niños corren peligro por las obras

Asimismo, Rodríguez señaló que los directivos (MOPC) no contemplaron las necesidades de los pobladores y además los trabajadores encargados no deben realizar esas explosiones de forma constante en el lugar, pues son peligrosos para los habitantes de la zona.

En el barrio Las Colinas 1 y 2 residen más de 200 niños que se exponen al peligro constante de respirar aire no propicio y además el sonido de las explosiones son tan fuertes, que dañan la estructura de las viviendas.

La denunciante también resaltó que les están causando un grave problema a la comunidad exponiéndolos al peligro, sobre todo a los niños pequeños, que ya empezarán las clases este lunes y tendrán que desplazarse por el lugar para ir a sus escuelas.

De igual manera, la mujer mencionó que hay otras alternativas menos dañinas que puedan utilizar para el desarrollo de sus trabajos, pero al parecer las obras deben ser entregadas en junio y por eso están acelerando. Los habitantes ya han tratado de dialogar con los trabajadores y estos contestaron que ellos solo están cumpliendo órdenes y que no pueden hacer nada con las casas.

“Estamos muy preocupados, les reclamamos a los obreros y ellos hacen caso omiso a nuestras peticiones”, agregó.

Al respecto, desde la corresponsalía de ABC Color en la zona se llamó al representante de Obras Públicas, el ingeniero Isaac Campuzano, pero no contestó a las llamadas. En caso de querer brindar declaraciones, puede comunicarse con la corresponsal.